Hoy hemos ido a la biblioteca y hemos sacado tres guías: China, Brasil y Mallorca. Eso da bastantes pistas de lo que nos queda hasta final de año, que no es poco, ni breve.
En diciembre, 25 o 27 días a China -casi seguro- o a Brasil.
Pero nos quedan seis bonitos días en noviembre -21 al 26, ya concedidos-, que habrá, que disfrutar y vamos por partes:
-Lo que queríamos hacer y no será : Friuli Venecia - Julia, con Trieste, Udine, Aquileia y Grado. Vuelos caros e incómodos por no salir o llegar, en todos los casos, a Madrid y alojamientos de precios impagables para cualquier persona con un mínimo de dignidad y de preocupación por su estado financiero.
-Lo que deberíamos hacer, porque lo llevamos pensando hace tiempo y nos mola -a pesar, de que no aguantamos a los alemanes-: Núremberg, Rotemburgo, Bamberg y Ratisbona. Organizativamente, no hay por donde cogerlo, en está fría época del año y con reducción importante de vuelos.
-Lo que nos gustaría hacer.por comodidad: la parte atlántica del Sáhara Occidental, que no hemos llevado a cabo en nuestro último viaje a Marruecos hace un par de semanas, que ya hicimos deprisa en 2012, camino de Mauritania y que sería factible por precio de vuelos, clima y presupuesto, aunque más complicado por cuadrar 1200 kilómetros en seis jornadas, con transportes irregulares. Aunque, no descartamos inventar una variante y sacar algo parecido adelante
En tres o cuatro días -como Mazón -, terminaremos decidiendo.
-Lo que no nos va a quedar más remedio -con perdón y respecto a todo el mundo -, que hacer: Mallorca, donde ya estuvimos en 2003 y lo pasamos genial. Vuelos asequibles y con buenos horarios, visitas sencillas, pero con un elevado coste del alojamiento.
Castillo de Bellver, sierra de Tramontana, Alcudia, calas de Millor y Agulla...
Viaje al turismo de masas y de ensaimadas voladoras en aviones de bajo coste, como llevamos viendo durante años, en Barajas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario