Este es el blog de algunos de nuestros últimos viajes (principalmente, de los largos). Es la versión de bolsillo de los extensos relatos, que se encuentran en la web, que se enlaza a la derecha. Cualquier consulta o denuncia de contenidos inadecuados, ofensivos o ilegales, que encontréis en los comentarios publicados en los posts, se ruega sean enviadas, a losviajesdeeva@gmail.com.
Mostrando entradas con la etiqueta Venezuela. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Venezuela. Mostrar todas las entradas

lunes, 23 de marzo de 2020

Parece, que a la octava, tampoco irá la vencida (parte I)


       Pues no. Finalmente, no ha podido ser y nos hemos quedado sin viaje -y en casa, como todos-, al este de Estados Unidos y Canadá. Ha sido por los pelos, dado que el día del inicio del periplo, fue el del Decreto del Estado de Alarma. Si hubiéramos volado solo una semana antes, no hubiéramos tenido problemas para comenzar la andadura. Ahora bien y como estamos comprobando en carnes ajenas, lo complicado habría sido regresar..

          Pero, vayamos por partes, porque no es la primera vez, ni la segunda, ni la tercera..., ni la última, que huelgas, pandemias, despidos laborales, juicios, herencias y otros aconteceres extraordinarios, se interponen en nuestros planes viajeros. Nuestra vida es así de movida y debemos aceptarlo. Sólo hablaremos de incidentes con vuelos, ya que podríamos agrandar la lista con otros sucesos ferroviarios, como los constantes paros salvajes de la francesa SNCF o el crucero entre Colombia y Panamá.

          1°.- Noviembre, de 2008. Regresamos a casa desde Estambul, después de una larga excedencia viajera por el mundo, de 10 meses, vía Roma. El primer vuelo transcurre sin problemas, pero al llegar a la ciudad italiana, comenzamos a oír por megafonía la palabra "scopiero". Sabíamos su signicado, porque años atrás, habíamos vivido una huelga de vaporettos en Venecia.

          Tras horas de confusión y carreras, se cancela el vuelo, de Alitalia. Se forma una cola de centenares de metros -el paro es salvaje e imprevistos y afecta a todos los vuelos de la compañía-, que da acceso a una sola ventanilla. Si nos hubiéramos colocado al final, no habríamos llegado nunca.

          Inspeccionamos el panorama. Nos suenan las caras de unas chicas españolas, que habíamos visto antes y que se encuentran en el primer tercio de la fila. Con todo el morro, les pedimos si nos dejan colocarnos detrás de ellas, a lo que nos dicen: ¡"si los de detrás no dicen nada!...

          Al margen de pasar una buena tarde y noche -aunque con tensión-, logramos un cambio de vuelo para el mediodía siguiente, con Iberia, una notable estancia en un hotel de cuatro estrellas, una opipara cena y un excelente desayuno y todo, sin cargo alguno. La mayoría de la gente con la que hablamos, ni siquiera consiguió el trasvase a otro vuelo y tuvieron, que comprar otros boletos y dormir en el aeropuerto. Al caos se sumó, que ese mismo día hubo un accidente de Ryanair, en Ciampino, cerrándose este aeródromo.

        2°.- Marzo, de 2009. Después de haber perdido -mas bien, me lo robaron- un juicio laboral y quedar muy tocados, compramos unos billetes para un viaje, a China. A falta de dos días para volar, me llama mi abogado y me dice, que me tengo, que quedar para unas negociaciones. No hay tiempo para hacer un poder, porque es viernes al mediodía y volamos el lunes a primera hora. ¡Gran fatalidad!, porque no nos devuelven el dinero y son mil euros. Pero, recompensa final, porque logramos un buen acuerdo y una buena indemnización.

          3°.- Mayo de ese mismo año. Al fin, viajamos a China. Pero, no hacía muchas semanas, había estallado a nivel mundial, la pandemia de la gripe A. Al aterrizar, en Shanghái, decenas de hombres con trajes blancos y cascos herméticos, nos toman muestras de salud y de temperatura, durante largo rato. Finalmente y tras un gran estado de nervios, pudimos ingresar en el país.

          4°.- Abril, de 2010. Mi pareja ha sido despedida, fulminantemente y nos quedan cuatro días para ir, a Venezuela. No se puede cancelar, ni cambiar y debemos quedarnos para organizar una demanda en el juzgado de lo Social, que tiene sus plazos. Al día siguiente, modifican el horario de uno de nuestros vuelos y pudimos cancelar y recuperar todo el dinero.

          5°.- Ese mismo mes, también nos pilla la crisis de las cenizas volcánicas de Islandia, que afectó al norte y centro de Europa. Afortunadamente, nosotros viajábamos, a Marruecos.

          6°.- Diciembre de ese mismo año. Transcurre el viernes 3 y se inicia la brutal huelga de los controladores aéreos. A nosotros, eso nos habría dado igual, sino hubiera sido, porque el lunes 6, volabamus a Sudáfrica, vía Libia. Después de que se decreta se el ahora tan famoso  Estado de Alarma y de tres jornadas de infarto, conseguimos iniciar el que fue nuestro tercer viaje largo, a África austral y del este.

          7°.- Junio de 2018. A mediados de mes, queremos viajar, a Japón e iniciar nuestro séptimo viaje largo. Una tarde, nos decidimos a comprar unos boletos a buen precio. Aún no sé porque, tuve una corazonada y decidí aplazar la compra 24 horas. A la mañana siguiente, a mi pareja le llegó una carta citando la para una vista con abogado y procurador para una semana después por un reparto de herencia. ¡No habríamos podido viajar y habríamos perdido el dinero de los vuelos, a Tokio!

          Conseguimos un muy buen acuerdo y no siquiera llegó a haber juicio. En agosto fuimos al notario y en septiembre, nos pusimos rumbo al país del sol naciente.

          8°.- El caso actual. Es largo de contar, por lo que lo dejamos para el próximo post.

jueves, 24 de diciembre de 2015

El gran reto de 2.016, el séptimo viaje largo

                                            Todas las fotos son, de Seúl (Corea del Sur), nuestro destino lejano, de 2.015



        Hace escasamente un mes, este blog cumplió cinco años -la web va camino de diez- y llegadas estas fechas cercanas a la Nochevieja, siempre suelo hacer un vaticinio de lo que serán los viajes del año siguiente, en este caso, 2.016. Hasta el momento, creo que sólo he acertado una vez, pero aún así, no me desanimo en seguir haciendo este ejercicio. Para empezar, una semanita en Ceredeña en enero -destino lárgamente retrasado-, no sería un mal aperitivo para dar el pistoletazo de salida.


          2.016 debería ser el año de nuestro séptimo y último viaje largo, que comenzaría en Australia y/o Nueva Zelanda, donde llegaríamos tras las escalas, que fueran necesarias, si eso nos supone un ahorro. No lo he mirado ahora, pero en su día, la fórmula más económica era, Madrid-Dubai-Kuala Lumpur-Melbourne.

          No pasaríamos más de un mes en estos dos países y después, abordaríamosmos un periplo por Brunei y Japón, sin descartar nuestro retorno a Indonesia y Filipinas, si las cosas se ponen favorables. Tampoco hacemos ascos, a dejarnos caer por algún otro país de Oceanía, pero este asunto está muy en pañales.

          Más adelante, lo ideal sería volver a China y gestionar los permisos para visitar Tibet y a través de nuestra querida Nepal, recalar en India, para hacer un último periplo muy selectivo por el noroeste y nordeste de esta nación, de unos dos meses de duración..

          Descartado Pakistán -sí o sí-, el abanico se abre para mostrar tres posibilidades: Yemen y Djibuti, Kirguistán y Uzbekistán o volvernos para casa sin más botín. No está claro el inicio de este gran y apasionante proyecto, pero nunca sería antes de abril.

          De no haber periplo largo, es seguro, que sólo acometeríamos un único viaje lejano anual, de no más de tres semanas de duración, que por este orden, presenta a los siguientes candidatos: Cuba, República Dominicana y Haití, Jamaica, Puerto Rico, Islandia, Venezuela, Kirguistán y Uzbekistán, Yemen y Japón.

          Mientras esperamos ansiosos, a que llegue el pacto de izquierdas, os deseamos feliz año, felices viajes para el 2.016 y que la nochebuena no os traiga muchas discusiones de política. Yo tengo suerte, porque en mi familia -salvo mi cuñado-, todos pensamos lo mismo.  

jueves, 29 de enero de 2015

Islas de Centroamérica y algo más, otra posible alternativa

República Dominicana
          Llegamos a finales de enero y aún todo está por decidir, en cuanto a los viajes de 2.015. No es una situación, que nos guste, pero estamos aprendiendo a convivir con ella. De momento, no existe otro remedio.

          Además, de todas las opciones barajadas en los dos posts anteriores, añadimos un nuevo proyecto de viaje largo -sería el séptimo, que transcurriría , mayormente, por Centroamérica y que tendría una duración estimada, de cuatro o cinco meses. La fecha de partida es indeterminada y el lugar de inicio, también.
                                                                                                                                             Surinam
          Sería un recorrido circular, que podría comenzar en Venezuela y proseguir por Guyana y Surinam. Después, recalaríamos en Trinidad y Tobago y algunas de las siguientes islas: Granada, San Vicente y las Granadinas, Barbados, Santa Lucía, Dominica, Antigua y Barbuda y San Cristóbal y Nieves.

          Continuaríamos por Puerto Rico, República Dominicana y Haití. Finalizaríamos el periplo, sin prisas, con Jamaica, Cuba y tal vez, Bahamas, aunque este último destino es bastante improbable.

          El proyecto aún, está en pañales, pero cuenta con unos cuantos inconvenientes, que deberemos superar. No parece fácil. Los principales son:

          -El precio de los vuelos: Volar a La Habana, Punta Cana o Cancún no es demasiado caro, pero si los trayectos entre las diferentes islas o desde Madrid -o cualquier parte de Europa-, a Venezuela o Puerto Rico, lugares ideales para empezar.
Puerto Rico
          -El precio y los horarios de los ferries, que pudieran sustituir, en muchos casos, a no pocos tramos aéreos.

          -El coste de la vida en muchos de los países propuestos y más, después del desplome del euro.

          -La seguridad: sobre todo, en países, como Venezuela o Haití, pero no, exclusivamente.

          -La climatología, dependiendo de la época del año, en que se pudiera desarrollar esta nueva e ilusionante aventura.



miércoles, 7 de enero de 2015

Muchas dudas para 2.015

Sydney (Australia)
          Hace siete días, que ha comenzado el año 2.015, pero aún mantenemos muchas dudas, sobre los destinos viajeros de este ejercicio. Creo, que iremos tomando decisiones en las próximas semanas, dependiendo de alguna oferta laboral, que hay en ciernes. En cualquier caso, nos debatimos entre hacer el séptimo viaje largo, expuesto en el post de más abajo o generar granero -ahorrar- para 2.016 y meternos todavía, en un proyecto más ambicioso.

          En este últimos caso, optaríamos por disfrutar de un par de viajes, de en torno a unos 15 días cada uno, con las siguientes propuestas sobre la mesa:

          1ª.- Japón y Corea. Es un clásico. Llevamos media vida intentando hacer este periplo y por diversas razones, siempre se nos ha resistido. Juega a favor, la significativa bajada del yen (142 por cada euro, a fecha de hoy).                                                                Islandia

          2ª.- Australia. A pesar de conocer 123 países, aún no nos hemos estrenado en Oceanía, por increíble, que parezca. El mayor inconveniente es el precio del vuelo, aunque hemos visto opciones razonables, a través de Delhi, Kuala Lumpur o Singapur. Existiría la posibilidad remota, de combinar con algo de Nueva Zelanda.

          3ª.- Cuba. Otro de los lugares, que permanecen gafados. El primer intento de ir a este país, se produjo en 1.998 y tuvimos, que cancelar el viaje, a última hora. A favor juega, que es una de las opciones favoritas. En contra, el precio de los vuelos.

          4ª.- Venezuela. El único país importante, que nos falta, de Sudamérica. En 2.009, llegamos a tener boletos comprados y un desagradable acontecimiento, nos hizo desistir del viaje. Afortunadamente, recuperamos el importe de los pasajes aéreos.
Saná (Yemen)
          5ª.- República Dominicana y Haití. Tampoco es una novedad, en cuanto a nuestras preferencias, aunque nunca hemos estado cerca de llevarlo a cabo. El precio del avión y la inseguridad en Haití, juegan en nuestra contra.

          6ª.- Kirguistán, Usbekistan y Azerbayán. Si no pudieran ser los tres países, al menos, los dos primeros. Este plan cuenta con unas muy buenas opciones, dado que es de un presupuesto total de perfil medio.

          7ª.- Yemen. Tampoco es nuevo el interés en este fantástico país y cuenta con posibilidades, dado que el tema, que más nos preocupaba -la seguridad-, parece estar controlado, según nos ha informado, recientemente, algún viajero.

          8ª.- Islandia. Buscaríamos compañeros de viaje, para tratar de que este fuera más económico.
                                                                                                                                        Salto del Ángel (Venezuela
          9ª.- Este de Estados Unidos y Canadá. Tal, como se está poniendo el dólar, no parece el mejor momento para esta aventura.

          10ª.- Puerto Rico. Se trata de la previsión más improbable, pero no queremos de dejarlo de tener en cuenta.

          No se contemplan incursiones en Europa o África, pero nunca se sabe.