Si en la primera parte de este contenido hablábamos de las molestias en los aeropuertos, camino de Dakhla, en nuestro primer viaje de este año, ahora, nos vamos a referir a los personajes de ese día, centrándonos, fundamentalmente, en tres:
1. -"Pa chula, yo". En la cola de embarque de Ryanair toma posiciones una pareja mixta -ella española, él marroquí o saharahui-, que pretende colocar en cabina dos maletas, que por no mucho y por culpa de las ruedas, se pasan de las medidas permitidas por la compañía irlandesa. Él, más discreto y callado y ella, totalmente ofuscada, comienzan la batalla con el personal de la aerolínea, sin éxito. Si las quieren introducir, deben pagar una cifra significativa o las abandonan allí mismo.
Entonces y a grito partido, la señora clama: "Pa chula, yo". Seguidamente, abre los bultos, saca dos pequeños objetos de cada uno y los deja allí mismo, abandonado el lugar. Dos pensamientos llegan a nuestra mente: por un lado, la expresión no está bien utilizada, porque chulería está relacionada con salirse con la suya o con victoria y en este caso no la ha habido. Y por otro, algo misterioso: ¿Por qué tanta maleta, para tan poca cosa?. Un rato después, se aclaró nuestra duda. Ellos viven en Dakhla y habían comprado los contenedores de equipaje en Madrid, no para este viaje, sino para los del futuro.
2. -La "encantada de conocerse". Matrimonio ya mayor. Él es conciliador y trata de contener a su mujer, que es de esas personas,que amargan el día a cualquiera, que tiene la desgracia de acabar junto a ellos y nosotros tuvimos, que aguantarla sentada delante en el avión y detrás en la cola del control de pasaportes. Sin lugar a dudas, la persona más toxica y chabacana, que hayamos encontrado en unas cuantas décadas.
Estas son algunas de sus perlas, siempre a grito pelado:
- Sobre una joven, que había sentada cerca en el vuelo: "Mírala, va a enfermar, seguro. Como se puede vivir, comiendo dos pimientos crudos rojo y amarillo, cuatro fresas, pan de pipas y unas lonchas de queso "
Y ya en la cola de los pasaportes, durante un lento ingreso, las siguientes:
- "Siempre me toca en la fila de los torpes y de los tontos"
- "Mira tú, que le dije a mi amiga, que estuve de vacaciones en las Comoras y no sabe dónde están. ¡Es, que hay gente tan ignorante!"
- "Me he hecho con la Holafly, por 40€, para tener datos durante el viaje"(una tarjeta local sale bastante más barata)
- "Que se creen la gente de las ONG o mis compañeros del trabajo. Yo vengo aquí de vacaciones y no para arreglarle la vida a nadie"... Podríamos seguir...
Aseguraron , que querían ir a Nouadhibou, en Mauritania, alquilando un coche, porque ahora el visado y por 50€, se puede hacer en la frontera.
Nuestra pequeña venganza fue, que al llegar al hotel y mirar en el MAE descubrimos, que desde el cinco de enero de 2025, la visa solo se puede hacer on line. ¡Que se jodan!
3. -El gerente del hotel Tirs: Este lugar fue nuestro alojamiento durante nuestras tres noches en Dakhla. El hombre nos atendió en perfectísimo español, sin acento. Amable, aunque impulsivo, quiso llevarnos a determinados huertos, donde no queríamos ir. Nos pidió 200 dirham por la doble con baño, que conseguimos dejar en 150. Lo curioso y ventajoso de este personaje es, que te cambia dinero en efectivo -cuanto más, mejor- por encima de la tasa oficial. Nos dió 10,40 dirham por euro, cuando la divisa estaba a 10,34 y la mejor tasa en la ciudad, a 10,07. Al parecer, está acaparando moneda europea para viajar, próximamente, a España.
No hay comentarios:
Publicar un comentario