Este es el blog de algunos de nuestros últimos viajes (principalmente, de los largos). Es la versión de bolsillo de los extensos relatos, que se encuentran en la web, que se enlaza a la derecha. Cualquier consulta o denuncia de contenidos inadecuados, ofensivos o ilegales, que encontréis en los comentarios publicados en los posts, se ruega sean enviadas, a losviajesdeeva@gmail.com.

lunes, 23 de noviembre de 2015

Kaos y Konfusión, a la Koreana: un mal inicio de viaje, solventado con paciencia

Cuando decidimos ir a Corea del Sur -con poca información en la red y con menos ganas de buscarla por nuestra parte-, pensábamos, que nuestros mayores problemas iban a ser, movernos en los diversos transportes y entendernos con la gente. ¡Oh sorpresa!: lo que más nos violentó por el contrario los primeros días fue, conseguir hotel, comida, cervezas y bebidas alcohólicas.
                                                                      Incheon (Corea del Sur)
Fuera de Seúl, no son frecuentes los primeros y en cualquier caso, siempre -salvo unos pocos- son de precio elevado, aunque muy detallistas en sus prestaciones y servicios. En cuanto a la comida, es el país más caro por nosotros conocidos en el mundo, tanto en supermercados, como en restaurantes y puestos callejeros, en este orden descendente. La cerveza es para ricos y el alcohol -hasta que uno descubre el “truco” del soju y los licores autóctonos de sabores- para personas muy influyentes, poderosas o traficantes sin escrúpulos de alcurnia. Pensamos, que durante dieciocho días, nos tocaría prescindir de él.
Esta y las tres siguientes son, de Seúl (Corea del Sur)
Dicen los gitanos, que no quieren ver a sus hijos con buenos principios y nosotros -después de haber pasado el peor inicio de viaje en décadas-, estamos de acuerdo, si se cumple la segunda parte del proverbio (la de que todo luego vaya bien).

Legamos a la localidad de Incheon y decidimos parar el día allí, dado que nuestra errada guía hablaba de algunas zonas de interés: un ayuntamiento horrible y una catedral y un puerto, que se encuentran a unos diez kilómetros de. centro. La lluvia lo inunda todo y rompe, como fichas del tetris, los endebles paraguas -de quita y pon- de los obstinados lugareños.

Después de un vuelo de radio medio, a Estambul, una escala de catorce horas y uno de casi seiscientos minutos, nos hallamos en una cuidad dispersa, con un downtown compuesto por dos enormes centros comerciales -a los que ya ha llegado la Navidad, siendo 8 de noviembre-, sin hoteles y con una muy rica comida -fuertemente influida por la japonesa-, al triple de precio, que en España.

Tras una desesperanzada frustración, se nos enciende la luz de emergencia. Regresaremos al aeropuerto, haremos noche al raso en su terminal -después de dos jornadas viajando- y de madrugada, a Seúl. ¡Allí todo será distinto!, pensamos. 

Pues no. Tras ocho horas desesperadas de alternar, ver cosas y hacer gestiones -con la mochila a cuestas-, sólo hemos resuelto la cuestión de una buena -dados los tiempos- tasa de cambio. Por primera vez en un viaje, queremos volver para casa, casi al día de haber salido. Hoteles hay, pero no nos resignamos a pagar lo que nos piden. Comida, toda la que quieras, a precio del cubierto de una boda de un aristócrata o político de pro español. Y en la bebida, seguimos la siguiente escala, teniendo en cuenta nuestros precios patrios: agua mineral, a precio de cerveza; cerveza, a precio de cubata y cubata, al equivalente de medio kilo de jamón de Jabugo.

Para colmo, es día festivo en el país y todos los supermercados se encuentran cerrados, a cal y canto. 


Nuestra indomable persistencia, finalmente y tras ser pasto de la angustia, tiene premio en tres cuartos de hora. Encontramos un súper abierto, junto a la estación de trenes, donde a cada rato ofrecen degustaciones de más de veinte platos de cocina tradicional -además de café, te, otras infusiones y yogur-, de forma generosa y amable (aunque te lo expliquen en coreano, a toda velocidad). Más adelante, nos daríamos cuenta, de que todos ofrecen esta posibilidad y la mayor parte de los mercados, también 

Allí mismo y para nuestro regocijo, encontramos bebidas alcohólicas de fabricación nacional, ricas y a poco menos de un euro la botella. Y paseando por una de las calles cercanas a la terminal ferroviaria, una señora oronda y alborotada nos ofrece un precio impensable por una habitación. No conoce nuestros números, por lo que un viandante le tiene que ayudar, a que le confirme, que lo que hemos escrito en un papel, es lo que ella solicita.

Pero, milagros no hay. Lo de la cerveza sigue sin solución.

martes, 27 de octubre de 2015

A la espera del séptimo viaje largo, esto es lo que hay

          Haciendo granero, a la espera de que en 2.016 hagamos nuestro séptimo y último viaje largo, las vacaciones de este año se van a reducir a unos 20 días, durante el mes de noviembre. Aún sin los vuelos comprados -aunque sí, investigados-, hay tres posibles itinerarios, que deberían transcurrir -en este orden, de mayor a menor chance- por Corea del Sur, Canadá, y el este de Estados Unidos y Canadá.
Seúl (Corea del Sur)
          El recorrido por el país asiático está casi perfilado. Llegaríamos a Incheon, que además de albergar el aeropuerto de Seúl, parece una ciudad atractiva y punto de partida para visitar la isla de Ganghvado, además de la fortaleza de de Suwon y Panmunjom.

          Seúl nos ocuparía -al menos- tres días. Y desde esta capital visitaríamos, madrugando, Buyeo y Gongiu.
                                                                                                                           Chiicago (Estados Unidos)
          En el sureste, Gyeongiu -valle y ciudad imprescindibles- y Busan, abarcarían unas tres jornadas. En el suroeste, Gwangiu (por que coño es este país, acaba todo en “giu”). La isla de Jejudo está en proceso de estudio, aunque quizás, no sea la mejor época para aventurarse en esta empresa.

          Nos hubiera gustado, hacer una escapada de unos cuatro días, a Tokio, pero ir hasta allí, nos sale por unos 250 euros -ida y vuelta, lo que es caro-, que no queremos gastar. Así, que Japón, quedara para el próximo periplo largo.
Toronto (Canadá)
          El circuito por Canadá y Estados Unidos, abarcaría Chicago, Cataratas del Niágara -lado canadiense-,, Toronto, Montreal, Ottawa, Quebec, Boston, Nueva York -segunda visita-, Filadeldia y Whasington. La fortaleza del dólar y el alto precio de los hoteles en Estados Unidos, hacen improbable -pero no imposible- este plan.

          La opción canadiense -casi inviable, por el precio de los vuelos-, abarcaría los anteriores lugares citados en este país y alguno más.


          Más noticias, espero, a la vuelta. 

jueves, 6 de agosto de 2015

Requiem por Siria y Nepal

                                                                                                  Palmira (Siria)
          Quizás, esta entrada la debí publicar hace dos o tres meses, con el tema más de actualidad, pero la desidia motivada por el insufrible verano, que nos envuelve desde mayo, hasta no sé cuando, me ha hecho tomarme la vida con mucha pereza. Fiestas, limonada, conciertos, cerveza... y muchas duchas de agua fría.
                                                                                                               Casas Colmena (Siria)
          Hace ya bastantes semanas, que estoy muy triste por la poca repercusión, que se está dando en los medios de comunicación, a la casi total pérdida del patrimonio monumental, de Siria y, en menor medida, de Nepal (de este país se ha hablado un poco más). Pero, aún me apena más, que las maravillas, que vieron nuestros ojos no hace tanto, se las hallamos hurtado a las próximas generaciones.                                                                           
                         Alepo (Siria)
        Juntando la licencia por matrimonio y unos cucnatos días de vacaciones, conseguimos organizar un increíble periplo de casi un mes, por Siria, Jordania, Israel y Palestina, que nunca olvidaremos.

          Creedme, si os digo y a pesar de que ahora, combatan los unos contra los otros en atroz e incomprensible contienda, que los sirios -y conocemos, casi 130 países- son las gentes más amables del mundo. No hablan inglés, cierto es, ni obligación, que tienen. Ni siquiera, en la mayoría de las ocasiones, conocen nuestro alfabeto. Pero, paradójicamente, ha sido uno de los países donde nos ha resultado más fácil movernos. Preguntabas algo en la calle y de inmediato, se activaba toda una red de personas, que ni siquiera se conocían entre ellas, para dar con la solución. Todo eran atenciones, sin agobio ninguno.
                                                                                  Hama (Siria)
          Paseabas por los entrañables y ordenados zocos y nadie te molestaba, Podías toquetear una cosa 20 veces, que el vendedor, ni te miraba, Podías probar los dulces o frutos secos de los puestos especializados, preguntando sólo: Can I?. Y en el restaurante, el camarero te llevaba a la cocina, para que vieras todos los platos y eligieras al gusto (por cierto: la cocina siria es de las mejores del mundo). A veces, por cuenta de la casa, caía un entrante, una bandeja de encurtidos, un té o una copita de arak.

          Porque, aunque musulmana, Siria era tolerante con el alcohol. Podías tomarte una fresca lata de cerveza en las calles del barrio cristiano, de Damasco, sin ser increpado o corregido. En esta misma ciudad, las jóvenes universitarias vestían con vaqueros y sin velo (no así, en ciudades, como Hama -la más conservadora del país- o Alepo).   Katmandu (Nepal)

          Según mis noticias, Alepo está destruida, llevándose por el medio su magnífica mezquita y el zoco cubierto más grande del mundo. Palmira ha sido saqueada y algo más -me temo-, que aún no sabemos. El típico castillo templario y medieval, que todos hemos soñado de niños y que estaba entero -llamado Crac de los Caballeros-, se encuentra parcialmente dañado. Lo mismo le ocurre al teatro romano de Bosra, uno de los mejor conservados del mundo. Nada sé de las ciudades muertas, de Apamea, de Hama, de Malula..., pero me temo lo peor. Lo que el hombre preservó durante cientos de años, no tardo ni cinco minutos en morir en manos de estas bestias pardas coetáneas. Francamente, no me hubiera gustado vivir este momento histórico.
                                                                                                                             Pashupatinath (Nepal)
          Lo de Nepal, admito, puede resultar distinto. Al fin y al cabo, fueron las fuerzas de la naturaleza. Pero, ¿hasta que punto estamos forzándola a comportarse de esa violenta manera?. No soy yo muy integrista de las catástrofes, que pronostican los agoreros del cambio climático. Creo, que no son tantas las evidenciaz, para predecir a tan largo plazo y que lo que hoy no tiene solución, sea posible resolverlo en 2.025. Pero, algún dato objetivo, si hay: de los 15 veranos más calurosos, desde que se dispone de datos, 14 han sido en el siglo XXI.

         Si quiero, en otro orden de cosas, amonestar a esos bocazas -no fueron pocos-, que dijeron: “¡qué importa el patrimonio cultural, con toda la gente, que ha muerto!”, Pues, preocupa y mucho. El terremoto mató a miles de personas y es un desastre, pero la pérdida de sus monumentos, afecta a 7.000 millones de seres humanos, que vivimos en el mundo y ya no podremos verlos. Y posiblemente, a varias de las generaciones venideras.
Patan (Nepal)

          Al contrario, que los sirios, no son los nepalíes santos de mi devoción. Ya sé, que es una injusticia acusar a un pueblo por el comportamientos inmoral de unos miles de gentes en los lugares turístico. Pero, la mente humana tiende a simplificar. No era cómodo transitar por un país, en el que cada cinco minutos te estaban tratando de engañar para sacarte más dinero.     Janakpur (Nepal)

martes, 19 de mayo de 2015

Como ha pasado el tiempo: ¡¡hace 25 años!!

          Corría 1.990. Nosotros y muchos otros veinteañeros, aprovechábamos el verano para hacer el interrail (en nuestro caso, por segunda vez). ¡Qué tiempos aquellos!, en los que los universitarios íbamos a Alemania a engullir cerveza tras cerveza y no a servirlas, como ocurre hoy en día.

Cervecería de Munich (Alemania)

lunes, 16 de febrero de 2015

Destinos modestos, para hacer granero

          He tenido, que llegar la tercera semana de febrero, para que se clarifique de forma nítida -aunque, no definitiva, ni mucho menos- nuestro año viajero. Lo más probable es, que este ejercicio hagamos granero y ahorremos lo suficiente, para poder acometer en el medio plazo -2.016 ó 2.017-, el séptimo viaje largo, por países como, Australia, Nueva Zelanda, Brunei, Corea del Sur, Japón, tercer periplo por India y Yemen, entre otros deseados lugares. Tal vez y si encontramos buenos precios de vuelos, Kirguistán y Uzbekistán, se podrían añadir a la lista. La duración, entre seis y nueve meses.
Valle del Batzán (Navarra)
          El hecho de poder trabajar, en una España tan castigada y deprimida, más la flojera del euro frente a la mayoría de de las monedas fuertes -yen, dólar australiano, neozelandés o norteamericano y hasta la rupia india: hace medio año nos daban 83 por cada euro y ahora, apenas se obtienen 70-, nos han llevado a tomar esta decisión.

          Con este panorama en ciernes, volveremos a disfrutar de destinos nacionales, como en 2.013, durante Semana Santa y puentes, que hay unos cuantos. Es probable, que entre los sagrados, 1 y 5 de abril, disfrutemos de una agradable estancia por el valle del Baztán (Navarra). Desde nuestro centro base de Elizonodo, visitaremos pueblos, como Almandoz, Berroeta, Aniz, Ziga, Oronoz-Mugaire, Arraioz, Irurita, Gartzain, Elbete, Lekaroz, Arizkun, Azpilkueta, Erratzu y Amaiur, Todos en un radio, de entre cinco y quince kilómetros. La clave estará, en que haga buen tiempo, dado que parece, que el precio del alojamiento no va a ser un inconveniente, como preveíamos, inicialmente.
                                                                                                                La Habana (Cuba)
          P ara otro fin de semana largo, dejaremos una escapada por la comunidad de Madrid, abarcando lugares, como El Escorial, La Pedriza, Manzanares el Real y Chinchón (ampliable a otros sitios, aún sin determinar).

          Tres destinos internacionales destacan sobre el resto, en este 2.015, para llevar a cabo dos viajes de un par de semanas: a elegir, entre Haití y República Dominicana, Cuba o Islandia. Ya iremos viendo.

jueves, 29 de enero de 2015

Islas de Centroamérica y algo más, otra posible alternativa

República Dominicana
          Llegamos a finales de enero y aún todo está por decidir, en cuanto a los viajes de 2.015. No es una situación, que nos guste, pero estamos aprendiendo a convivir con ella. De momento, no existe otro remedio.

          Además, de todas las opciones barajadas en los dos posts anteriores, añadimos un nuevo proyecto de viaje largo -sería el séptimo, que transcurriría , mayormente, por Centroamérica y que tendría una duración estimada, de cuatro o cinco meses. La fecha de partida es indeterminada y el lugar de inicio, también.
                                                                                                                                             Surinam
          Sería un recorrido circular, que podría comenzar en Venezuela y proseguir por Guyana y Surinam. Después, recalaríamos en Trinidad y Tobago y algunas de las siguientes islas: Granada, San Vicente y las Granadinas, Barbados, Santa Lucía, Dominica, Antigua y Barbuda y San Cristóbal y Nieves.

          Continuaríamos por Puerto Rico, República Dominicana y Haití. Finalizaríamos el periplo, sin prisas, con Jamaica, Cuba y tal vez, Bahamas, aunque este último destino es bastante improbable.

          El proyecto aún, está en pañales, pero cuenta con unos cuantos inconvenientes, que deberemos superar. No parece fácil. Los principales son:

          -El precio de los vuelos: Volar a La Habana, Punta Cana o Cancún no es demasiado caro, pero si los trayectos entre las diferentes islas o desde Madrid -o cualquier parte de Europa-, a Venezuela o Puerto Rico, lugares ideales para empezar.
Puerto Rico
          -El precio y los horarios de los ferries, que pudieran sustituir, en muchos casos, a no pocos tramos aéreos.

          -El coste de la vida en muchos de los países propuestos y más, después del desplome del euro.

          -La seguridad: sobre todo, en países, como Venezuela o Haití, pero no, exclusivamente.

          -La climatología, dependiendo de la época del año, en que se pudiera desarrollar esta nueva e ilusionante aventura.



miércoles, 7 de enero de 2015

Muchas dudas para 2.015

Sydney (Australia)
          Hace siete días, que ha comenzado el año 2.015, pero aún mantenemos muchas dudas, sobre los destinos viajeros de este ejercicio. Creo, que iremos tomando decisiones en las próximas semanas, dependiendo de alguna oferta laboral, que hay en ciernes. En cualquier caso, nos debatimos entre hacer el séptimo viaje largo, expuesto en el post de más abajo o generar granero -ahorrar- para 2.016 y meternos todavía, en un proyecto más ambicioso.

          En este últimos caso, optaríamos por disfrutar de un par de viajes, de en torno a unos 15 días cada uno, con las siguientes propuestas sobre la mesa:

          1ª.- Japón y Corea. Es un clásico. Llevamos media vida intentando hacer este periplo y por diversas razones, siempre se nos ha resistido. Juega a favor, la significativa bajada del yen (142 por cada euro, a fecha de hoy).                                                                Islandia

          2ª.- Australia. A pesar de conocer 123 países, aún no nos hemos estrenado en Oceanía, por increíble, que parezca. El mayor inconveniente es el precio del vuelo, aunque hemos visto opciones razonables, a través de Delhi, Kuala Lumpur o Singapur. Existiría la posibilidad remota, de combinar con algo de Nueva Zelanda.

          3ª.- Cuba. Otro de los lugares, que permanecen gafados. El primer intento de ir a este país, se produjo en 1.998 y tuvimos, que cancelar el viaje, a última hora. A favor juega, que es una de las opciones favoritas. En contra, el precio de los vuelos.

          4ª.- Venezuela. El único país importante, que nos falta, de Sudamérica. En 2.009, llegamos a tener boletos comprados y un desagradable acontecimiento, nos hizo desistir del viaje. Afortunadamente, recuperamos el importe de los pasajes aéreos.
Saná (Yemen)
          5ª.- República Dominicana y Haití. Tampoco es una novedad, en cuanto a nuestras preferencias, aunque nunca hemos estado cerca de llevarlo a cabo. El precio del avión y la inseguridad en Haití, juegan en nuestra contra.

          6ª.- Kirguistán, Usbekistan y Azerbayán. Si no pudieran ser los tres países, al menos, los dos primeros. Este plan cuenta con unas muy buenas opciones, dado que es de un presupuesto total de perfil medio.

          7ª.- Yemen. Tampoco es nuevo el interés en este fantástico país y cuenta con posibilidades, dado que el tema, que más nos preocupaba -la seguridad-, parece estar controlado, según nos ha informado, recientemente, algún viajero.

          8ª.- Islandia. Buscaríamos compañeros de viaje, para tratar de que este fuera más económico.
                                                                                                                                        Salto del Ángel (Venezuela
          9ª.- Este de Estados Unidos y Canadá. Tal, como se está poniendo el dólar, no parece el mejor momento para esta aventura.

          10ª.- Puerto Rico. Se trata de la previsión más improbable, pero no queremos de dejarlo de tener en cuenta.

          No se contemplan incursiones en Europa o África, pero nunca se sabe.


sábado, 29 de noviembre de 2014

Cocinando el séptimo viaje largo. Lo que no sabemos, es, si hay suficiente carbón y bastante comida

                                                                                             Kumbakonam (Inida)
          Seguimos trabajando en el difuso proyecto del séptimo viaje largo, que lo mismo se produce dentro de dos meses, que ni siquiera, se llega a realizar. Tendrán, que pasar las Navidades y empezar el nuevo año, para que todo se clarifique un poco más. Por si acaso, nosotros vamos planificando, para tenerlo todo preparado.   Sydney (Australia)

          Y es, que esté séptimo viaje largo, además de volver por cuarta vez, a India, incluiría destinos muy caros, sobre los que no podemos ser dubitativos, porque permanecer demasiado tiempo atrapados en ellos, nos llevaría a la ruina económica. Vayamos por partes.

          Nuestra primera intención es, volar desde Madrid, a Delhi (233 euros, para las fechas previstas). Nuestro proyecto indio duraría en tono a mes y medio, en el que nos centraríamos en los estados del nordeste y el noroeste del país. De Camino, iríamos visitando otros destinos sueltos, que no hemos abarcado en nuestros viajes anteriores, a India.
Chimbadaram (India)
          Desde aquí, se bren varias posibilidades, aunque muy similares. Vuelo desde Calcuta, o Chennai -depende donde nos pille mejor-, a Kuala Lumpur -lo más probable- o, a Singapur (en todos los casos, la tarida ronda los 100 euros, normalmente, con Air Asia, aunque no exclusivamente).

          Melbourne, sería nuestro siguiente destino, con un plan australiano muy concreto: el este del país, con Sydney, Cairns y la gran barrera de Coral. Ampliar, a Nueva Zelanda el viaje, es una posibilidad, aún no estudiada, pero altamente deseada.
Kyoto (Japón)
          Nuestro sueño -económicamente, no acometible, en la actualidad-, sería haber hecho antes, Japón y Corea del Sur y después, Polinesia, isla de Pascua, interior de Bolivia y Venezuela. Más tarde, volar a Estados Unidos y hacer el este del país y Canadá.

          Lo más realista es, plantearse volver, por Japón y Corea del Sur. Y aún, no hemos encontrado la forma barata de hacerlo, desde Australia. A partir de ahí, volver a casa es, lo más probable, pero la manera y el tiempo en hacerlo, aún nos resultan misteriosos. Y, probablemente esta decisión, se tomará sobre la marcha).


          Seguiremos informando.  

lunes, 24 de noviembre de 2014

España e India: cifras y datos

                                                                    Maspalomas (Gran Canaria) 
         Quiero que este post, maneje más datos y cifras, que opiniones. Las conclusiones las sacáis vosotros. ¿Demagogia o verdades escandalosas, cómo puños?. Posibilidad tenéis para opinar en los comentarios.
Rishikesh (India)
          Ya os comenté en cierta ocasión, que en India, hay un 33% de exclusión social, pero -y el dato es para alarmarse-, que en España, ya estamos en el 25% y subiendo. La semana pasada hemos conocido, que la tercera parte de los españoles, que trabajan -normalmente, por ser jornadas cortas-, lo hacen por menos del equivalente, del salario mínimo interprofesional Cada día aumentan, las personas, que disponen de curro, pero no salen de pobres, ni con todos sus esfuerzos.

          En India, uno puede acumular varios y pequeños trabajilloss. Quizás, alguno de ellos sea algo humillante, pero rsultan trabajos, al fin y al cabo. En España, recientemente escuché, a una persona con dos carreras y cinco idiomas, que se encuentra limpiando aseos, en una ciudad, de Alemania. Y tengo el caso de una amiga licenciada y con muchos años de ejercicio, a la que hoy no llaman, ni las empresas de limpieza. En India, tú decides si te humillas o no. Aquí, lo deciden los empresarios y la administración. Enhorabuena, si has conseguido la suerte de hallarte, entre los benditos humillados.

                                   Teror (Gran Canaria)
          En la actualidad, estoy escribiendo relatos de viajes anteriores -todos, por destinos nacionales-, que en su día dejé en un cajón, por pereza. Hace unos días releí y escribí, que por un trayecto de autobús muy cutre, entre Vitigudino y Aldeadávila de la Ribera (Salmanca), pagamos el año pasado, 4,40 euros cada uno, por un tramo de 31 kilómetros. Es, prácticamente, el mismo importe, que abonamos hace unos meses, por un billete de tren, en litera, entre Varanasi y Calcuta, separadas entre sí, por 680 kilómetros. Haciendo una fácil división se concluye, que viajar por España, es 22 veces más caro, que hacerlo, por India.

          11,63 euros abonamos, por un bus de Zaragoza, a Lérida (152 kilómetros), con una impresentable empresa -desaconsejada para todo el mundo-, llamada Ágreda. Por menos de ese importe, puedes hacer, en India, el trayecto entre Kanyakumari -punta del país- y Amritsar -en la frontera, de Pakistán-. O lo que es lo mismo: 3,187 kilómetros. Y creedme, si os digo, que este tren existe.
Kanchanaburi (Tailandia)
          Duración y destino de nuestros viajes, de 2.013: Cinco días en Asturias y Cantabria -Semana Santa-, 3 en la provincia de Soria, dos en la de Burgos, 8 en la Costa Brava, seis en Salmanca y 16, entre Aragón, Cataluña, Canarias y Andalucía. Sumando todos los gastos de esos periplos, sobrepasamos los 2.200 euros en total. No llegan, a 2.000, si descontamos los vuelos, los que nos gastamos en casi cinco meses, por Tailandia, India, Bangladesh, Egipto e Israel. E incluyo los costes de los visados, de tres de esas cinco naciones.               Lérida

          Y una más. A un indio, entrar en cualquiera de sus numerosos monumentos nacionales -y son incontables-, le cuesta, entre 6 y 12 céntimos de euro (un poco más caro ,pero no mucho, si hablamos del Taj Mahal). Para un español, visitar la más mínima tontería en nuestro país, no le baja de tres o cuatro euros. Cualquier catedral -Lérida, por ejemplo-, te vale 5 euros o más, Y por encima de 10, 15 ó 20, las grandes joyas de nuestro patrimonio.



           Podría seguir, pero creo, que no merece la pena., porque sería más de lo mismo

viernes, 14 de noviembre de 2014

¿Séptimo viaje largo?... Posibilidades hay, pero lo vamos viendo

Cachemira (India)
          Como, siete eran y son los pecados capitales y nosotros los tenemos todos, no podía haber un sexto viaje largo, sin un séptimo y eso, que habíamos prometido no hacerlo. Y lo confieso y asumo: aún tenemos menos credibilidad, que el PP de estos tiempos -bueno y de todos-, porque juramos por activa y por pasiva, no volver a India, en muchos años. Y probablemente, estemos allí, de nuevo, en menos de tres meses, sólo medio año después, de haber dejado el país. ¡Por qué será, que cuando no estás en India, quieres estar en otra parte y cuando te alejas de India, sólo quieres volver!.

          El tercer viaje, a India, será muy distinto, que los dos anteriores, en los que abarcamos, casi la totalidad del país. Nos centraremos, fundamentalmente, en el norte -y algo del centro- y raramente, bajaríamos más abajo, de Hyderabad o Hampi. El no haber vuelto a visitar este sitio, en el segundo viaje, nos tiene con bastantes remordimientos.
                                                                                                                                           Sikkin (India)
          En un principio, visitaremos estados nuevos del norte, como Jammu y Cachemira, Assam, Sikkim y otros del mordeste y profundizaremos en otros, ya conocidos, pero en los que aún nos quedan muchas cosas por descubrir, como es el caso, de Himachal Pradesh.

          Naturalmente y al tratarse de un viaje largo, tendremos que buscar, añadir para añadir a este proyecto, otros países. Y a ese propósito, aún le queda mucho trabajo de campo. Descartamos Pakistán, que nos sigue pareciendo peligroso. Y ya así, las candidaturas son las de siempre. Por un lado, Kirguistán y Uzbekistán o Japón y Corea. Aunque, la visita al país nipón sería exprés, centrándonos, en Tokio, Kioto y los alrededores de ambos. La razón, que no queremos gastarnos, lo que cuesta el Japan Rail Pass.
Himachal Pradesh (India)
          También hay posibilidades, de retornar a Vietnam e incluso y si todo se confabula, hacer un Oceanía, también exprés, que sería la avanzadilla soñada, para un octavo viaje largo global, de más duración y que abarcara cuatro continentes (todos, menos, probablemente, África). Y ese, digo yo, ya metidos en los cincuenta, sería el último.

          Seguiremos informando.