Las cinco primeras son, de Christchurch y las otras dos, de Kaikoura (Nueva Zelanda)
Nuestra mente, anda ya más en Asia, que en Oceanía. Tratamos de reservar vuelos para Lombok, Denpasar, Taipei o Male, pero no lo encontramos, a buen precio. ¡No se pueden dar todos los pasos el mismo día!
Dije, que tendría, que volver a dedicar un post, a la compañía de autobuses, InterCity, de Nueva Zelanda y voy a hacerlo. Otra vez, nos la han jugado y hemos tenido, que renunciar, a ir, Picton y a Nelson (aunque ya, la verdad sea dicha, no teníamos muchas ganas de llegar hasta tan lejos en el norte de la isla).
Ni en la oficina de turismo, ni en la sede de la compañía, se esfuerzan de demasiado en explicarte las cosas y se limitan a darte los precios de la página web. No te cuentan -porque no tiene explicación lógica, ni posible-, por qué de hora en hora, las tarifas de los distintos recorridos suben al doble o al triple o que diferencia hay -en servicios y asientos-, entre el precio de un billete estandar y otro, denominado flexi. ¡A río revuelto, ganancia de pescadores! Y ellos tienen las redes más grandes y la cara más dura.
En un país, donde el concepto de servicio público es inexistente y dónde se alienta a buscarte tu propia vida, tu solo, es difícil encontrar sosiego y sobre todo, comprensión. Luego diremos, que si los de los bemos de Indonesia, son unos ladrones, porque te estafan 30 céntimos, o los tuck tucks, de India o de Tailandia... Aquí, te las meten dobladas, te sacan lo que les da la gana y encima, debes responder con una sonrisa, porque supuestamente, te están haciendo un favor. Porque, si no cuentas con InterCity o no sabes o no quieres, conducir, te quedarías tirado, en Christchurch, sin otra forma de abordar otros destinos de la isla sur. ¡Así es la realidad y mejor, no disfrazarla!
Y si te enfadas -porque, si o si, al final y un día, te terminas cabreando-, se ponen dignos y racistas.
Al final y por agotar los días -con Intercity, claro está- iremos a Kaikoura, en la que tampoco tenemos muchas expectativas, ni siquiera de encontrar alojamiento, por lo que hemos visto en Booking. Si todo va bien, no escribiré más post de esta isla sur, ni de la lamentable, Intercity.
Nuestra mente, anda ya más en Asia, que en Oceanía. Tratamos de reservar vuelos para Lombok, Denpasar, Taipei o Male, pero no lo encontramos, a buen precio. ¡No se pueden dar todos los pasos el mismo día!
Dije, que tendría, que volver a dedicar un post, a la compañía de autobuses, InterCity, de Nueva Zelanda y voy a hacerlo. Otra vez, nos la han jugado y hemos tenido, que renunciar, a ir, Picton y a Nelson (aunque ya, la verdad sea dicha, no teníamos muchas ganas de llegar hasta tan lejos en el norte de la isla).
Ni en la oficina de turismo, ni en la sede de la compañía, se esfuerzan de demasiado en explicarte las cosas y se limitan a darte los precios de la página web. No te cuentan -porque no tiene explicación lógica, ni posible-, por qué de hora en hora, las tarifas de los distintos recorridos suben al doble o al triple o que diferencia hay -en servicios y asientos-, entre el precio de un billete estandar y otro, denominado flexi. ¡A río revuelto, ganancia de pescadores! Y ellos tienen las redes más grandes y la cara más dura.
En un país, donde el concepto de servicio público es inexistente y dónde se alienta a buscarte tu propia vida, tu solo, es difícil encontrar sosiego y sobre todo, comprensión. Luego diremos, que si los de los bemos de Indonesia, son unos ladrones, porque te estafan 30 céntimos, o los tuck tucks, de India o de Tailandia... Aquí, te las meten dobladas, te sacan lo que les da la gana y encima, debes responder con una sonrisa, porque supuestamente, te están haciendo un favor. Porque, si no cuentas con InterCity o no sabes o no quieres, conducir, te quedarías tirado, en Christchurch, sin otra forma de abordar otros destinos de la isla sur. ¡Así es la realidad y mejor, no disfrazarla!
Y si te enfadas -porque, si o si, al final y un día, te terminas cabreando-, se ponen dignos y racistas.
Al final y por agotar los días -con Intercity, claro está- iremos a Kaikoura, en la que tampoco tenemos muchas expectativas, ni siquiera de encontrar alojamiento, por lo que hemos visto en Booking. Si todo va bien, no escribiré más post de esta isla sur, ni de la lamentable, Intercity.