Este es el blog de algunos de nuestros últimos viajes (principalmente, de los largos). Es la versión de bolsillo de los extensos relatos, que se encuentran en la web, que se enlaza a la derecha. Cualquier consulta o denuncia de contenidos inadecuados, ofensivos o ilegales, que encontréis en los comentarios publicados en los posts, se ruega sean enviadas, a losviajesdeeva@gmail.com.

lunes, 12 de diciembre de 2011

Historias de "farangis" o extranjeros (parte I de II)

Normalmente, los etíopes son afables y tranquilos, aunque depende también de la zona del país. No es lo mismo el excelente trato recibido en Gondar, que las piedras, agua o insultos, de los que fuimos víctimas en Harar.
                                                                            Bahir Dar
Los timos no están muy generalizados, aunque hay quién trata - sin escrúpulos - de conseguir un extra, por lo que hay que preguntar por los precios de todo: desde un "mastika" (chicle) a la compra más elevada, que necesitemos acometer. Poruqe, nos hemos topado con incautos, a los que les han llegado a facturar 30 €, por una simple ronda de refrescos.

Las mayores molestias se producen en los restaurantes. Dado que, a Anna, Joan y Alex y a nosotros, no nos ocurrió por separado, pensamos que actúan cuando los grupos son más numerosos y los suponen menos atentos a la cuenta. Los espaguetis, comida central y socorrida del farangi (literalmente, extranjero, en la lengua local) suelen ser el elemento estelar.

Pase, que te los tarden dos horas en traer - para que sigas bebiendo cervezas y agrandando la cja-, pero lo que ya no cuela, es que intenten cobrarte dos raciones, habiendo pedido sólo una y no habiéndolos cocinado siquiera ( el pobre Joan, se quedó casi sin comer en Lalbella, por esta kafkiana causa). Y aún tuvieron bemoles, para discutir hasta 10 minutos, incluso cuando la propia cocinera, reconocía su error, de intentar facturarlos.
Dire Dawa
              En  la localidad de Weldiya, solicitamos tres platos de espaguetis  y uno de macarrones y no sirvieron una de las raciones de los primeros. Reclamamos "one more" y nos traen y nos sueltan con violencia  sobre la mesa, otros tres platos de espaguetis y otro más de macarrones. La pelea fue cruenta, para pagar sólo lo adecuado, cosa que acabamos consiguiendo, no sin pasar un rato bien desagradable.

            Otra de las técnicas, es hacerse los locos, con que no saben los números en ingles, a la hora del pedido y luego, te recitan la cuenta de corrido, con un acento mejor y más atinado, que el de  anglosajón de nacimiento. De esta forma en Mekele, tuvimos que pagar 35 birr por unos apestosos espaguetis con salsa de tomate, cuando no suelen costar, más de 15 o 20 y además, en la carta no había nada. que respondiera ese importe o se aproximara..
                                            
                              Monasteio del lago Tana
              La cerveza, también se lleva su protagonismo. En Aksun, se nos cayó y rompió una botella casi entera y no sólo, no nos pusieron otra, sino que además de cobrarla, nos requirieron una cantidad desorbitada por el envase. En Mekele - según un lugareño - la Castell valía a 9 birrs. Poco después y con las birras ya en la mesa, vino a pedirnos perdón, dado que el propietario le había dicho, que eso era ayer: hoy ya costaba 13 (y menos mal, que no le dio por decir, 50).

Idéntica y larga y larga discusión, mantuvimos en Weldiya, donde por la mañana habíamos abonado 10 birrs por un tercio de cervez y por la noche, nos solicitaban 12, alegando tarifa nocturna. ¡Lo que tienen estos es mucha cara a todas las horas del día!. Pero, no se salieron con la suya

             De surrealismo, se puede calificar a las cervecerías, que no disponen de cervezas o a las teterías, de té y aunque tú estés viendo tomarlo al resto de clientes, te dicen con absoluta normalidad, que no te lo sirven, porque no tienen.

1 comentario:

Paloma dijo...

Hola Eva,
se me hace extraño dirigirme a ti cuando llevo todito el invierno
inmersa en tus viajes. En fin, me presento, me llamo Paloma y soy una
chica asturiana de 27 años. Como te imaginarás tanto mi chico como yo
somos unos apasionados de los viajes, y buscando aquí y allá nos
encontramos con tu blog.
La primera vez fue por casualidad preparando un hipotético viaje a
Jordania (que nunca llegó) peeeeeeeeeero una cosa me llevó a otra y al
final (con este crudo y lluvioso invierno que se hace eterno por esta
zona) me acabé leyendo un sinfín de viajes: de no poder hacerlos o
incluso salir de casa (porque este tiempo amarga a cualquiera) por lo
menos echar a volar desde la salita con tus relatos y buscando fotos
(penoso, lo sé, pero algo es algo,jaja).

Todo este rollo es porque acabo de venir de la agencia de reserviar
viaje y alojamiento para Amsterdam y, como no podía ser de otra forma,
me metí en tu blog para ver tus impresiones, qué visitar y esas cosas.
Total que me encuentro que estuviste la semana pasada por mi
pueblo!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Vivimos en Luarca y cuando lo vi por un lado sentí emoción y por otro
lado una curiosidad algo "nerviosilla" por ver qué te parecía; en fin,
fuiste bastante benevolente porque desde luego lo de la oficina de
turismo y la habitación sin baño ni tele por 30
€...................... (verde, amarilla y azul de la vergüenza nos
dejaste........... puf!!). Por cierto, tengo curiosidad por saber
quiénes fueron los impresentables, porque ya hay que tener valor para
ofrecerlo............. en fin.

Pues nada, creo que este pueblo tiene encanto y es bonito pero no se
sabe explotar (sin hacerlo literalmente que es a lo que se dedica la
hostelería por aquí, a atracar a mano armada para,como decimos por
esta zona, "dar el palo" una vez y que no vuelvan nunca más) ni
vender.
Precisamente el domingo 20 estuvimos en Cudillero dando un mini-paseo
y comiendo un helado, y nos rabiaba el hecho de que siendo más
pequeño, más incómodo (por tanta cuesta) y demás, fuese más turístico
por estar mejor preparado, más anunciado, más limpio, dotado de amplio
aparcamiento, con menús asequibles y comida muy rica, y en general
dándole mil vueltas a Luarca.

Es una pena pero es lo que hay; de todas formas, si os apetece
regresar y de paso conocer Puerto de Vega, aquí tenéis un sitio (sé
que se hace raro pero después de todo un año leyendo tu blog da la
impresión de que formas parte de nuestras vidas de alguna forma; sobre
todo porque en cualquier mini-escapada estás presente en las
conversaciones y, como también nosotros somos bastante críticos,
tenemos unos cuantos puntos en común).

Bueno, lo dicho, no quiero aburrirte pero el hecho de que hayais
estado aquí la semana pasada (o la otra) me animó a lanzarme a
escribirte.
Es una pena que por culpa de lo que te encontraste no os hayais
quedado a dormir ni a cenar (por cierto, según lo vi le mandé el
enlace a Alberto -que está en la oficina- y pensamos lo que os hubiese
gustado cenar en un restaurante pequeñito que lleva un matrimonio
joven, donde no hay una carta muy extensa pero está todo riquísimo a
muy buen precio y mejor trato).

Esperamos haberos puesto los dientes largos

un abrazo:

Paloma.