Esta y las dos de abajo son, de Srinagar
Una vez, que has accedido al país, te
das cuenta de que casi nada cambia en India, durante años (o
siglos). Sin embargo, las modificaciones en la normativa de visados
están a la orden del día. Tres veces hemos arribado al país y en
cada una de ellas, hemos obtenido el visado de una forma diferente.
Para empezar, el ministerio de asuntos
exteriores, de India, ha cerrado desde el pasado mes de abril, las
oficinas de ARKE, en Madrid y Barcelona. Eran las encargadas, desde
hace unos cuantos años, de gestionar las visas para acceder al país,
que tenían una validez de seis meses, desde la fecha de su emisión
y permitían múltiples entradas, por un periodo no superior a los
noventa días cada una.
Esta y la de abajo son, de Hampi
Ahora, la única forma para el viajero
de ingresar al país, es a través de la e-via o visa-online, que se
obtiene en la siguiente dirección web:
https://indianvisaonline.gov.in/evisa/tvoa.html.
Permite el acceso, a India, por un periodo de sesenta días con dos
entradas y un coste de cincuenta dólares estadounidenses.
Si bien, se disminuyen los días y se
reducen las entradas al país, se aceleran bastante los trámites:
dicen, que tardan cuatro días en aprobarla, pero a nosotros, nos la
concedieron en tan solo 24 horas. Además, sale más barata -unos 20
euros menos, que cuando viajamos hace tres años- y no necesita de
presencia física o de entrega de pasaporte o fotos, pudiéndose
hacer los trámites desde cualquier parte del mundo (basta el wi-fi
de cualquier hotel y un teléfono móvil o tableta).
Basta con subir dos archivos, además
de rellenar el pesado y habitual cuestionario: uno con una foto
reciente de carné con fondo blanco y otro con la primera página del
pasaporte, que previamente, habremos escaneado.
Deelhi
Eso sí: a pesar de ser on-line, hay
que imprimirla -no basta con mostrar la pantalla del teléfono
móvil-, porque si no, te pueden poner muchas pegas, a la hora de
embarcar en el vuelo de ingreso al país y en algún caso, hasta
denegarte el embarque. ¡Pocas bromas con esta gente!. Tomároslo en
serio.
Carretera, entre Leh y Srinagar
Al aterrizar, en India -nosotros lo
hicimos a través del aeropuerto, de Chennai-, las gestiones son muy
sencillas. No tuvimos, que esperar cola alguna y en menos de diez
minutos, conseguimos el sello en el pasaporte, los dos. Son, como los
de la vieja usanza, nada de modernas pegatinas con foto y te indican
la fecha límite de salida. La única pregunta, que nos hicieron, es
dónde íbamos a alojarnos.
Leh
Nosotros, encantados de la vida con
este nuevo sistema, que nos ahorra costes, de tener que ir, a Madrid
o enviar la documentación por mensajero, pero para estancias más
largas, como la que tuvimos hace tres años, supone una cortapisa
importante y tener, que hacer, varios visados seguidos (si es
posible, porque no lo he investigado).