Este es el blog de algunos de nuestros últimos viajes (principalmente, de los largos). Es la versión de bolsillo de los extensos relatos, que se encuentran en la web, que se enlaza a la derecha. Cualquier consulta o denuncia de contenidos inadecuados, ofensivos o ilegales, que encontréis en los comentarios publicados en los posts, se ruega sean enviadas, a losviajesdeeva@gmail.com.

lunes, 28 de marzo de 2016

Lo que hemos hecho por la cerveza (parte III, de IV)

Zanzibar (Tanzania)
          Seguimos en África oriental, para continuar por occidente de este mismo continente y terminar, en Líbano, en esta tercera entrega de lo que hemos hecho por la cerveza en nuestros viajes.

          13º, Corrían los primeros días de marzo, de 2.011, cuando arribamos, a Dar es Saalam ( Tanzania). Eran las once y media de la noche y el viaje había sido duro -por carreteras horrorosas y en un vehículo insufrible-, puesto que habíamos partido a las cuatro de la madrugada, desde Kiela (frontera con Malawi). No disponemos de plano, ni guía y desconocemos, donde nos ha dejado el autobús.
                                                                                                  Estas dos siguientes son, de San Luís, en Senegal
          A pesar de que el lúgubre escenario impresiona, tratamos de controlar los nervios para pensar con claridad. Lo normal, hubiera sido tratar de buscar alojamiento, pero decidimos sentarnos en la terraza de un bar cercano, a tomar varias cervezas, sin prisa. Afortunadamente, conocemos al vigilante de un hotel de lujo, que por una pírrica cantidad de dinero, nos lleva en su coche por los hoteles de las inmediaciones, hasta que nos conformamos con uno. ¡Noche salvada!. Al día siguiente constatamos, que estamos a más de cinco kilómetros del centro.

          14º.- Unas jornadas después, desembarcamos en Zanzibar, una isla preciosa. Tenemos problemas para encontrar un alojamiento adecuado en la capital, a pesar de que hay decenas de ellos. Pero, aún es peor, encontrar bares o tiendas de cervezas. Desesperados y tras preguntar a mucha gente, entramos en una agencia de viajes, a ver si su propietario nos puede ayudar. Él no, pero nos pone al teléfono con un desconocido, que habla perfecto inglés y que nos describe el camino hacia la escondida y única tienda de la ciudad.
Tambacounda, en Senegal
          15º.- A finales de febrero, de 2.012, llegamos a San Luís, en Senegal. Hemos atravesado Marruecos, Sahara Occidental y Mauritania y llevamos más de dos semanas sin poder tomar una maldita cerveza. En la guía vienen dos pequeños ultramarinos, donde las venden, pero han desaparecido. No encontramos otras opciones. Juro y vocifero con enorme enfado, que o aparece la cerveza y las bebidas alcohólicas o me vuelvo a casa, sin visitar Senegal, Mali, Burkina Faso y Costa de Marfil. La tienda de una gasolinera nos salva la vida una hora después, cuando ya hemos perdido la esperanza.
2, de Bamako, en Mali
          16º.- En el mismo país, en Tambacounda, existen numerosos bares. El caso es, que el más cercano nos pilla a más de diez minutos de nuestro periférico hotel. De forma absolutamente inconsciente, arriesgamos nuestras pertenencias -y tal vez, nuestras vidas- por tomar cerveza fresca, a la luz de la luna, regresando por un camino amenazante y casi oscuro.

          17ª.- La siguiente historia se las trae. Llegamos a Bamako, en Mali, a última hora de la tarde, después de un viaje accidentado, que nos ha tenido tirados en la carretera toda una noche. Hay tanques en la calle y hombres armados. Milagrosamente, encontramos alojamiento, junto a la estación de autobuses.

          A la mañana siguiente todo está cerrado y nos indican, que permanecerá igual, durante los próximos cinco días, por “oup d'etat”. Maldecimos nuestra suerte, pensando de que se trata de una festividad musulmana.

          Andamos unos cuatro kilómetros en busca de un supermercado, que viene en la guía. No hay civiles por la calle y si militares, que circulan en tanque o pegan tiros al aire. Y nosotros pensando: “como son estos africanos, que lo celebran todo a lo grande”.Por supuesto, el súper cerrado y a volver por el mismo camino, con idénticos peligros y sin la preciada cerveza. ¡Día de abstinencia!, para darnos cuenta, de que estamos en medio de un golpe de estado.

          18º.- La ciudad más conservadora, de Líbano, es por supuesto, Trípoli, en el norte del país. Allí pusimos nuestros pies, en abril, de 2.012. Comprar cerveza no es difícil, pero tratar de beber una lata en la vía pública, puede causar muchas molestias, como mínimo. Por este hecho, un alocado individuo radical, trató de arrebatárnosla y de agredirnos, físicamente. Tuvimos, que salir por patas y perdernos por las callejuelas del zoco.
Tripoli, en Líbano 

          En la vecina Siria -en 2.007-, nunca nos pusieron inconvenientes por tomar cerveza en la calle.

1 comentario:

Eva dijo...

AVANCE:

El próximo post, concluirá nuestras experiencias sobre lo que hemos hecho por la cerveza (en este caso, en India).

A partir de ahí, tenemos algunos pendientes, como son:

-Viaje para mayo: ¿Canadá o Japón?.

-Nuestros últimos conciertos.

-Próximo viaje, a India, dentro de un periplo largo: Estados del noreste -con permisos fáciles o más difíciles- y vuelta al noroete, a ampliar miras y a la zona de Hampi, en el sur (está todo muy avanzado).

-Compatriotas, que te encuentras en los viajes largos y más cortos: tan buena gente -normalmente-, como jetas, aprovechados y tacaños.

Saludos.

Eva