Este es el blog de algunos de nuestros últimos viajes (principalmente, de los largos). Es la versión de bolsillo de los extensos relatos, que se encuentran en la web, que se enlaza a la derecha. Cualquier consulta o denuncia de contenidos inadecuados, ofensivos o ilegales, que encontréis en los comentarios publicados en los posts, se ruega sean enviadas, a losviajesdeeva@gmail.com.

martes, 10 de diciembre de 2024

Ni el viaje será como pensábamos, ni Barajas es un aeropuerto seguro

           A través de una Lonely Planet de 2013, obtenida en la biblioteca pública, habíamos seleccionado a toda prisa unos pocos días antes los destinos de nuestro viaje por la costa turquesa de Turquia y de una semana de duración. No indagamos más, porque estábamos pendientes de otras cosas.

      Fue en el Media Distancia, que nos llevó de Valladolid a Madrid, en casi tres horas, donde profundizamos en el itinerario, para encontrarnos con dos cosas, que no nos gustaron nada. Este periplo está pensado para hacerse en coche de alquiler por la complejidad del recorrido y no en transporte público, como va a ser nuestro caso. Y de llevarlo a cabo así, deberíamos haber elegido el verano -y no diciembre -, cuando todos los medios de transporte están a pleno rendimiento.

          Y también nos dimos cuenta, de lo complejo que iba a ser, llegar a Ucagiz y Kekova, en tan poco tiempo,además de descartar Antalya, por suponernos 320 kilómetros a mayores -ida y vuelta- con tan solo ese destino de interés por el camino.

          Todo parecía claro sobre el papel, pero dos jornadas después, al llegar a Fethiye y constatar la realidad actual -y no la de la guia-, el viaje se volvió a dar la vuelta, bruscamente, como ya veremos más adelante.

          Llegamos a Madrid en pleno puente de diciembre y literalmente, fuimos fagocitados por el caos hirviente y generalizado del centro, en el fin de semana mas populoso del año. Tras saldar algunas promociones gratuitas en máquinas y stands de Samplia y visitar el ángel madrileño de Colón, nos fuimos despepitados, agotados y estresados, hacia el aeropuerto, donde haríamos noche, dado que, nuestro vuelo a Londres, saldrá a las 6 a.m.

          Son 51 los vuelos, que vamos a acumular este año, por lo que hemos pasado muchos días en este aeródromo. Y debemos decir, que su seguridad es bastante preocupante. 

        No hace mucho tiempo y estando en un baño de la T1, aporrearon la puerta en tres ocasiones, ordenándome salir. No lo hice, asi que me ahorré saber, que buscaban.

          Y hoy, hemos tenido dos incidentes. Estando sentados cenando y tomando una cerveza, nos han acorralado dos hombres y una mujer, que decían querer ayudarnos, por ser personas vulnerables, que vivimos en el aeropuerto. Los paramos en seco y también nos quedamos sin conocer sus intenciones. ¿Una secta? ¿Un timo?... El caso es, que teníamos buenas viandas y yo había estrenado esa tarde unos playeros de Puma, las suelas estaban intactas y se veían a la legua, al estar sentados con la planta de los pies hacia arriba.

          Más tarde, un pedigüeño nos acosó, requiriendo cincuenta céntimos y nadie actuó. Quizás los más normales en Barajas sean los mendigos de siempre, que no suelen meterse con nadie y a los que ahora -cada vez hay menos sillas en la T1-, han aglomerado en la T4.

Tumbas licias en Fethiye


 

Sarcófago en Fethiye


 

Fortaleza de Fethiye


 

miércoles, 4 de diciembre de 2024

Último viaje del año: Riviera turca

 


         El próximo domingo 8,  comenzamos el último viaje de este año fuera de nuestras fronteras, que nos llevará hasta los albores de Navidad, a la costa turquesa de Turquia. En este caso, los pocos más de 250 kilómetros, que separa Dalaman, de Antalya.

          Volamos a Londres Stanted, con Ryanair (20€). Allí, permanecemos unas veintidós horas, aunque no bajaremos a la ciudad, debido a los imposibles precios del trasporte. Aunque sí saldremos de la zona de tránsito, dado que hasta el 2 de abril de 2025 no es obligatoria la ETA-visado encubierto -, que saldrá por unas 12 libras.

          Desde Stanted y el lunes, pondremos rumbo, a Dalaman, también con Ryanair (22€). La vuelta es algo más complicada, aunque con la misma compañía: Dalaman -Londres y desde allí, a Castellón, la única opción asequible para volver a España en esas fechas (22 y 16€, respectivamente).

          Existe un vuelo entre Antalya y Londres, con Wizzair, que es bastante económico, pero llega a Gatwik. El cambio de aeropuerto para regresar, saldría casi tan caro, como todos los vuelos juntos.

          Desde el aeropuerto de Dalaman, iremos hasta Fethiye, donde abordaremos un bus nocturno de Flixbus, a Antalya, para ahorrarnos el hotel.

          Después, toca ir volviendo con un itinerario parecido al siguiente: isla de Kekova, Ucagiz, Kas, Kalkan, Valle de las Mariposas y Faralya, Ulodeniz y retorno a Fethiye.

          Ouigo y por 9€, nos transportaría de regreso a casa con un tren directo entre Valencia y Valladolid.

Navidades anteriores, en Bali, Puglia, Madrid...


 


Los camellos de El Corte inglés, en Preciados (Madrid)


 

Puerta del Sol de Madrid, en Navidad 🎄