Todas las fotos son, de Kiev (Ucrania)
Nos lo pensamos mucho, porque la información en la red es escasa y muy contradictoria, pero al final, decidimos volar, a Bangkok, por 200€, con la compañia ucraniana - precio increible-, desde Madrid. No podemos dar una nota global a la experiencia y por eso, nos explicamos, aunque sea, brevemente:
1° - Te obligan, a hacer el checkin en línea - en las 48 horas antes-, pero para lo único que sirve es, para obtener una plaza aleatoria y sobre todo, para que no te cobren 15€ por la emisión de la tarjeta física, que es obligatoria y que incluye en un mismo cartoncito, los dos vuelos ( no nos había ocurrido nunca antes)
2° - Checkin complicado, porque no teníamos billete de vuelta. Hubo que dialogar y conversar mucho con diferentes empleados, aunque, afortunadamente, sin tension.
3° - Vuelo Madrid-Kiev. Asientos incómodos. Mucho calor en la cabina, dos vasos de agua, como única prestación y azafatas poco esforzadas. Eso sí, muy buena puntualidad.
4° - Trayecto Kiev-Bangkok. Avión nuevo, muy buen entretenimiento a bordo -peliculas españolas incluidas-, cena muy correcta, desayuno regular y gran puntualidad.
La eficacia del aeropuerto, de Kiev, es extraordinaria. Controles muy rápidos de inmigración y de seguridad, tanto a la entrada, como a la salida del país.
Aunque ya conocíamos la ciudad y teniendo una escala de doce horas, salimos a visitarla, de nuevo.
Nos lo pensamos mucho, porque la información en la red es escasa y muy contradictoria, pero al final, decidimos volar, a Bangkok, por 200€, con la compañia ucraniana - precio increible-, desde Madrid. No podemos dar una nota global a la experiencia y por eso, nos explicamos, aunque sea, brevemente:
1° - Te obligan, a hacer el checkin en línea - en las 48 horas antes-, pero para lo único que sirve es, para obtener una plaza aleatoria y sobre todo, para que no te cobren 15€ por la emisión de la tarjeta física, que es obligatoria y que incluye en un mismo cartoncito, los dos vuelos ( no nos había ocurrido nunca antes)
2° - Checkin complicado, porque no teníamos billete de vuelta. Hubo que dialogar y conversar mucho con diferentes empleados, aunque, afortunadamente, sin tension.
3° - Vuelo Madrid-Kiev. Asientos incómodos. Mucho calor en la cabina, dos vasos de agua, como única prestación y azafatas poco esforzadas. Eso sí, muy buena puntualidad.
4° - Trayecto Kiev-Bangkok. Avión nuevo, muy buen entretenimiento a bordo -peliculas españolas incluidas-, cena muy correcta, desayuno regular y gran puntualidad.
La eficacia del aeropuerto, de Kiev, es extraordinaria. Controles muy rápidos de inmigración y de seguridad, tanto a la entrada, como a la salida del país.
Aunque ya conocíamos la ciudad y teniendo una escala de doce horas, salimos a visitarla, de nuevo.