Montreal (Canadá)
A falta de poco más de dos semanas
para el inicio del viaje, aún nos toca decidir el destino. Pierde
algo de fuerza Japón, para ganarla Canadá, debido al excelente
precio de los vuelos, en la actualidad (352 euros, a Montreal, ida y
vuelta). En un principio, habíamos pensado en acometer este periplo,
incluyendo varias ciudades del este de Estados Unidos -Boston-
Filadelfia, Washington y retorno a Nueva York-, pero la fortaleza del
dólar y el elevado precio de los hoteles nos han hecho desestimar
esta opción.
Niagara Falls (Canadá)
Se trata de un país, veinte veces más
grande, que España, donde sin embargo, viven once millones de
habitantes menos. Esto hace, que los vuelos interiores sean bastante
caros, a diferencia de su vecino del sur. Los buses tampoco son
baratos, aunque la compañía Megabus
(http://mobile.usablenet.com/mt/www.megabus.com/),
oferta precios, relativamente low cost, al no contar con estaciones y
reducir determinados servicios, Otra empresa de tarifass atractivos
es, Orleans Express (www.orleansexpress.com/fr/).
Descartamos el tren por su alto coste.
Toronto (Canadá)
En cuanto a los hoteles, utilizaremos
los buscadores habituales, al haber comprobado, que los específicos
del país muestran precios más costosos. En un principio y añadiendo
los impuestos -no se incluyen en las tarifas de ninguno de ellos y
son muchos-, calculamos unos 36 euros por habitación doble/noche de
media.
El itinerario para unos 18 días
-incluyendo ir y volver-, es lo que tenemos más claro y se ceñirá,
exclusivamente, al corredor central. Dos días para Montreal y uno
-tal vez- para las cercanas, Laurentides. A partir de ahí, se inicia
un circuito, que nos llevará a Upper Canadá Village, Ganakone, las
islas Thousand -quizás- y Kingston.
Kingston (Canadá)
Desde ahí, a Toronto y
posteriormente, a las cataratas del Niágara, de las que tampoco
esperamos demasiadas emociones, dado que conocemos Iguazú y
Victoria. La parte canadiense es más interesante, que la
norteamericana, aunque también más agitada, puesto que tiene tintes
de Las Vegas. Las cascadas ofrecen cuatro posibilidades básicas de
visita, que se pueden comprar por separado o en un pase global. Por
las fotos, que hemos visto, las más interesantes son, por este
orden, las dos primeras.
1º.- Maid of the mist: Paseo en barco
por el río con las cataratas a los lados. www.maidofthemist.com/es/.
Laurentides (Canadá)
2º,. Journey behind the falls.
Recorrido andando por detrás de las cascadas.
www.niagaraparks.com/niagara-falls-attractions/journey-behind-the-falls.html.
3º.- White water walk. Caminando
entre los rápidos.
www.niagaraparks.com/niagara-falls-attractions/white-water-walk.html.
4º.- Whirlpool aero car. Vistas desde
un teleférico de época.
www.niagaraparks.com/niagara-falls-attractions/whirlpool-aero-car.html.
Niagara Falls es la localidad, casi
intermedia, entre dos puntos -Niagara on the Lake y Port Erie-, que
une una interesante carretera, llamada Niagara Parkway
(www.visitniagaracanada.com/experiences/natural-wonders/the-niagara-parkway).
El recorrido se puede llevar a cabo en bici o andando, a través del
Niagara River Recreation Trail
(www.niagarafallstourism.com/play/outdoor-recreation/the-niagara-river-recreation-trail/).
Quebec (Canadá)
Si existe posibilidad -hasta ahora, no
la hemos encontrado-, viajaremos en bus nocturno, hasta Ottawa. Si
no, cambiaremos en Toronto. Nuestro último destino será la bella,
Quebec. No nos acercaremos a Wakefield, ni a Lewis, en las cercanías
de ambas ciudades, respectivamente.