Este es el blog de algunos de nuestros últimos viajes (principalmente, de los largos). Es la versión de bolsillo de los extensos relatos, que se encuentran en la web, que se enlaza a la derecha. Cualquier consulta o denuncia de contenidos inadecuados, ofensivos o ilegales, que encontréis en los comentarios publicados en los posts, se ruega sean enviadas, a losviajesdeeva@gmail.com.

miércoles, 2 de marzo de 2011

La vida vista desde una bicicleta

                                                          Luangwa
Entrar en Malaui ha sido un soplo de viento fresco. Ya no solo, porque te permitan tomar algo de aliento, al no cobrarte visado, sino porque hemos vuelto a ver a los ninos sonreir y al mundo -aunque con sus cosillas de siempre-, no estar enfrentado consigo mismo, en batalla fratricida.

            La ultima reyerta que tuvimos en Zambia, fue con los cambistas de la frontera. Tambien nosotros, siempre nos vamos a hacer "bussines", con lo mejor de cada casa. No solo nos querian enganar con el cambio, sino quedarse con parte de nuestro dinero. Y todo ello, ante la atenta y pasiva mirada de la policia. Pero, con cuatro gritos lo arreglamos, recuperamos el peculio y de repente, aparecio un tipo, que nos dio mejor tasa de cambio que en el banco, para nuestras kwuachas zambianas sobrantes.
                            Chipata
            La penultima, tuvo lugar en el hotel, donde nos despertaron a las 6,45, para preguntarnos si nos ibamos a quedar una noche o si no avisarnos, de que el check-out era a las ocho. A lo primero, ya habiamos contestado el dia anterior. A lo segundo, ni preguntamos, ya que habiamos visto un cartel, en el que se indica, que el horario de la salida es a las diez y media.

            Comprensible es, que te quieran estafar los buscavidas de la frontera. No asi, todo lo que vieron ayer nuestros ojos, antes y durante el viaje, que nos llevo desde Lusaka a Chipata.

            Como siempre y para hacer cualquier tramite -en este caso, la compra de los boletos del bus-, te rodean ocho negros. El vehiculo sale, con tres horas de retraso, hasta que no cabe en su interior, ni mas pasajeros, ni mas mercancia. En tres ocasiones, pedimos la devolucion del dinero.
                                                                                                Chipata 
Mas que por el retraso, estamos indignados, porque como son 10 empleados los de la compania y no tienen nada que hacer y se aburren, se decian a reirse de nosotros, pronunciando nuestros nombres burlescamente o simulando peleas, mientras nos van acorralando por toda la estacion, para luego, partirse de risa. Ni sacando nuestro peor caracter, conseguimos que se inmuten o que nos reintegren el importe pagado (que por cierto, no es bajo). Anteriormente, habian intentado sacarnos tres euros, por subirnos el equipaje al vehiculo: naranjas de la China!!.
                                                                                                                                                                        Chipata 
            A los cinco minutos de partir, paran en una gasolinera, donde nos bajan a todos, mientras se abastecen de gasolina -de nuevo ocho negros, rodean al que la dispensa- y no nos dejan subir, hasta media hora despues.

            A la hora de camino, un perro cruza la carretera y sin frenar o hacer sonar el claxon, el conductor le embiste con el potente parachoques, ante nuestro horror, al contemplarlo desde la primera fila. Al subnormal, no se le ocurre otra cosa, que reirse.  A lo largo del dilatado periplo, estan a punto de correr la misma suerte, un ciclista, un nino y decenas de despistadas cabras.

            Llegamos ya exhaustos y de noche y al bajar del bus, casi nos aplastan los agresivos taxistas. Sin embargo, Chipata por la manana, es bastante distinta de Lusaka. Comparte con ella, un extraordinario mercado, aunque aqui la gente -sin ser amable-, la menos no es hostil.

            Esta poblacion, como su vecina Michingi -ya en Malaui, a unos cuarenta kilometros- pueden ser probablemnte, las que dispongan de mayor numero de bicilcetas per capita del planeta. Se utilizan para todo: el autotransporte, el de otros pasajeros -las mujeres, siempre van sentadas de lado-, el de mercancias -todas las que se puedan imaginar- y el de las dos ultimas cosas juntas: ciclista, con senora detras y esta, con un saco de maiz encima. Resulta impresionante, contemplar la destreza de transportadores y transportados.
                                                                                                     Chipata 
            Llevamos solo, unas pocas horas en Malaui y ya hemos hecho mas de 30 fotos -la media diaria es de 13. La gente es aqui, maravillosa. Adios a Zambia para siempre!!.

sábado, 26 de febrero de 2011

Lusaka: ciudad hostil. Zambia: pais de espejismos (parte II de II)

                                     Todas las fotos de este post, son de Lusaka
Ah, se me olvidaba contaros!!. Nuestro angel de la guarda africano, volvio a aparecer y recuperamos nuestras fotos. Fueron dos minutos de vertigo. En medio del concurrido mercado, sufrimos un violento agarron de un brazo. El objetivo, al parecer, es que nos enfrentemos con el individuo que lo ha provocado, para despistarnos y que mientras, otro nos robe. No consiguen lo primero, pero si lo segundo. Reaccionamos rapido, con el gesto ya automatizado, de comprobar que llevamos todo en los bolsillos.

            Por la abrupta calle sin asfaltar, echamos a correr, detras del de blanco, que ha sido el provocador. Le pillamos quitandose la camisa, para despistar y dejandose debajo la de un equipo de futbol. Estamos en la entrada de un pasadizo subterraneo y gracias a que viene mucha gente de frente y a que hay numerosos puestos ambulantes, conseguimos acorralarlo, a gritos, junto a un complice. Tenemos -para variar- una botella de cerveza, que con los nervios, estamos dispuestos a partirles en la cabeza. En el forcejeo, el liquido cae al suelo, mientras por detras, aparecen otras dos personas, que nos devuelven la camara, con todas las fotos, sanas y salvas. No obstante y en la confusion, uno de los dos, observamos como al otro, aun le toquetean los bolsillos traseros del pantalon, por si todavia pueden sacar tajada economica.

            Huimos aceleradamente. Nos vamos a comer al cercano hotel, sin ser aun conscientes, de que nos hemos podido jugar la vida. Al regresar luego, por el mismo camino, somos vitoreados por los comerciantes de la zona, que no se habian perdido ni un solo detalle del suceso. San Valentin este ano, resulto como veis, mas trepidante, que amoroso

Lusaka: ciudad hostil. Zambia: pais de espejismos (parte I de II)

                                                            Río Zambeze, en la frontera entre Zimbabwe y Zambia
   Hoy en Lusaka, nos han robado la camara, con las casi 900 fotos del viaje. No hay copia de seguridad. Iban a por el dinero -siempre bien protegido en el bolsillo interior- y han confundido la funda con una cartera. Han sido cuatro tipejos, mediante la habitual tecnica del descuido. Iba en el bolsillo del pantalon corto, algo ancho, junto al movil. En realidad y siendo objetivos, es lo menos extrano, que nos ocurrio en esta jornada. Es normal que algo asi suceda, cuando somos los dos unicos blancos, que han visto, visitando la ciudad y transitando por sus mercados (por otra parte, los mas interesantes que hemos visto, a lo largo de los 71 dias de viaje).
 Livingstone
            Lo que ya no es tan justificables, es el acoso premeditado, que sufre el viajero cuando se mueve por esta ciudad: desde los agresivos comisionistas de las companias de autobuses, hasta los perseverantes pediguenos, de todas las edades, que pululan por todas partes; pasando por algunos comerciantes pesadisimos y sin escrupulos (afortunadamente, los menos).

            Mas, lo que ya no tiene excusa alguna, es que te molesten por el unico placer de entretenerse y reirse. El desempleo aqui es alto y el aburrimiento, lamentablemente, se soluciona de esta forma, en el pais mas hostil de los 97 que conocemos. En los mercados, la lucha es constante, porque ademas, si no te enfrentas estas perdido. Las camaras de fotos no son bienvenidas y tenderos y buscavidas, se avalanzan contra ti, exigiendo que no las hagas (si hay dinero de por medio, la cosa cambia). Por supuesto, intimidaciones las justas. Sacamos las que nos apetece -o casi-, aunque en un ambiente muy desagradable y violento. Unas veces, les repelemos a voces. Otras, con el silencio y en bastantes ocasiones, explicandoles, que estamos en un espacio publico y que son fotos panoramicas, no retratando a personas o tenderetes de cerca (siempre entendimos el legitimo derecho de alguien, a no verse plasmado en una instantanea, asi como su negocio).
                                                                                   Lusaka 
            La dureza del entorno, tambien es evidente. La basura campa a sus anchas por todas partes. Hay arboles abatidos y cruzados en medio de la calle y a las habituales alcantarillas sin tapar, de esta zona del planeta, aqui se unen enormes y profundos socavones -como si fueran de bombas- y fosos, como los de los castillos, aunque menos anchos, que rodean casi todo, sean edificios o parques. En su dia, debieron tener funcion de canalizaciones para desagues, pero hoy son enormes canales repletos de aguas fetidas y desperdicios de antiguedad diversa.
                                      Lusaka 
            A nuestro santoral africano tenemos que anadir a san Soprite, ese supermercado, que tantas veces nos ha salvado la vida y que sin el aqui, habriamos perecido de inanicion y sed.

            Los precios en Zambia -despues de pagar 50 dolares de visado-. son casi o mas elevados, que los de Estocolmo. En el super, las salchichas de frankfurt estan a seis eruos, la mortadela a doce y la coca cola de dos litros, a casi 3 euros. En una tienda de comida rapida, una simple hamburguesa, sale por 2,5 y un pollo entero, sin patatas ni nada mas, por mas de ocho euros.
                                                                                                                                                                      Lusaka  
            Zambia es un pais de espejismos: en un insulso pueblo como Livingstone, de repente, aparece el mejor mercado de artesania, que hemos visto en toda Africa. O un autobus nocturno tirado de precio, con destino a Lusaka, que es el primero que tuvimos con aire acondicionado desde el dia de Navidad. O cuando despues de la situacion descrita de la capital, llegas a la agradable avenida principal, con sus comercios, bancos, opticas (casi las unicas que hemos visto en el continente)... Posee una arbolada y cuidada zona peatonal en el medio, la unica de estas caracteristicas, de todo nuestro periplo.

            Igual ocurre con los mercados. Del de los puestos de fruta, en la mediana de la carretera o los que venden cachibaches sobre piedras en calles inhabitables, pasas sin solucion de continuidad, a uno edificado, impoluto y abastecido.   
                                                                                                Lusaka 

viernes, 11 de febrero de 2011

Los topicos no funcionan en Africa meridional

         Zanzibar (territorio autónomo, de Tanzania)
        Es cierto, que Africa es un continente maravilloso en el que se viven momentos imborrables e increibles. Tambien lo es, que la gente resulta autentica y hospitalaria o que contemplar animales salvajes en su habitat y a corta distancia, se convierte en una de las experiencias mas inolvidables y placenteras. Sin embargo, no es oro todo lo que reluce. Por ejemplo, de los 65 dias que llevamos aqui -a fecha 8 de febfrero-, 32 ha llovido y cuando se pone aqui a caer agua, no son nunca cuatro gotas.


      El mayor inconveniente de viajr por Africa, es el de no contar con un presupuesto ilimitado. Rular por estos lares resulta mucho mas costoso, que hacerlo por Hispanoamerica o Asia y a veces, incluso, que por la propia Europa. Hay que invertir mucho capital, si no se quieren recorrer insulsamente, miles de kilometros contemplando tan solo arboles, plataneras, maizales y pastos. Visitar cada parque nacional o reserva natural, sea por cuenta propia u organizada, sale por un ojo de la cara. Otro coste adicional en muchos paises, es el de los desproporcionados visaos, cuando los precios de la vida en la zona, no son nada economicos: por ejemplo, los del alojamiento, que casi nunca vale lo caro, que cuesta.
                                        Delta del Okavango (Botswana)
      Los costes de transporte tienen un precio dispar -desde muy elevados, hasta muy baratos- y los de la comida, al menos, son moderados, en un continente donde se puede comer de cine (hoy mismo, nos hemos metido entre pecho y espalda un chuleton, de 330 gramos, por 1,3 euros).


      Otro asunto es la contemplacion de animales. Desde luego, resulta bastante mas facil ver a los domesticos, que a los salvajes. Visionar a los cinco grandes o a los siete magnificos (elefante, leon, bufalo, leopardo, hipopotamo, rinoceronce y guepardo), no resulta nada facil y ni siquiera en una costosa excursion de varios dias, se tiene garantizado. Nosotros no hemos ido al Kruger (Sudafrica), pero la mayoria de los viajeros, que hemos encontrado y que estuvieron, salieron decepcionados, con muy pocas instantaneas y menos, de corta distancia. Algun que otro leon, a veces cojo o muerto y casi siempre, dormitando al sol. Pero, es que este animal, se muestra como el mas facil de encontrar en Africa.
                    Lusaka (Zambia)
      Bien es cierto, que si se viene con mucho tiempo y se consulta a los lugarenos, hay areas donde se pueden contemplar animales salvajes muy de cerca, sin desembolsar ni un euro, moviendose entre los campings, las propias viviendas de los pueblos, los arcenes de las carreteras... La wildlife es mas tangible en algunas ciudades, que en la propia naturaleza.


      Para terminar con lo negativo, hay que anadir, que volar entre paises africanos -por cercanos que esten-, es muy costoso y que las carreteras van dando mas vueltas, que la noria el dia mas algido de las fiestas patronales.


      En el terreno opuesto, tampoco son ciertos los topicos, que nos tratan de vender en los documentales o periodicos: Al menos en Africa meridional, la gente vive con bastante mas, del siempre citado, dolar diario. Zimbabwe es un pais bien pobre, donde en las grandes ciudades no funciona el alumbrado publico, pero por la calle o en los transportes, se ve a casi todos los ninos con su zumo y su paquete de galletas. Aunque, hay una multitud de personas, que se ganan la vida vendiendo en la calle, no encontraras casi gente, pidiendo, ni mendigando, ni menos aun, tratando de extorsionar a los viajeros.
                                                                                      Mutare (Zimbabwe)
      Las grandes ciudades, son mucho mas seguras de lo que se dice, si se toman unas cuantas precauciones basicas. Los pequenos van al colegio en pandilla, con su uniforme y su cartera, como en cualquier otro pais del mundo, mientras charlan y rien y las enfermedades, aunque es cierto que existen, no te estan todo el dia persiguiendo (los mosquitos, casi que si). Si no fuera por el Sida, la esperanza de vida de este area, seria casi similar a la europea. Hasta en las poblaciones mas remotas, hay un centro de salud -por basico que sea- y la medicina denominada tradicional o los ritos exotericos, se limitan a nucleos rurales muy determinados.


      En la mayoria de los establecimientos comerciales, existen neveras y congeladores, que mantienen los alimentos, perfectamente conservados. Mas viejo o mas moderno, cada ciudadano dispone de su movil y hasta en las aldeas, hay instaladas antenas parabolicas. Los jovenes entran en Facebook, casi en la misma proporcion, que en cualquier otra parte del mundo. Y no choca, que no haya librerias en todo el continente, porque salvo aisladamente algun periodico en el transporte publico, aqui nadie lee. Asi, que cuando salgamos de Malawi, nos tocara ir a Tanzania y a Kenia sin guia.


      Asi es Africa meridional. Otra cuestion debe ser, la zona subsahariana occidental. Pero seguro, que tambien es muy distinta y tan alejada de los topicos, como nos tratan de vender, los medios de comunicacion o los gobernantes. Algun dia, os lo contaremos tambien.
                                                                                 El Tofo (Mozambique)

lunes, 7 de febrero de 2011

La leccion mas didactica e inolvidable, que nos dieron jamas

                                                      Johannesburgo
      Ya hace tiempo que somos conscientes, de que en este viaje nos acompana un angel de la guarda, que nos saca de forma muy solvente de las situaciones mas complicadas y nos insufla buena suerte. A san Barclays, que tantas veces nos ha dado dinero del cajero -sobre todo en Zimbabwe y Mozambique-, cuando ningun otro banco estaba operativo, tenemos que anadir un nuevo santo en nuestro particular santoral africano: san Komatipoort, el pueblo donde hace unos diez dias, nos acogio un blanquito en su casa de forma gratuita.
 
      A este lugar tuvimos que volver desde Johanesburgo, despues de tomar la decision de llegar hasta Malawi, ascendiendo por Mozambique. Hay unos 500 kilometros y 12 horas de trayecto, en un colorido, incomodo y caotico tren. Tras el largo viaje y una vez en el destino, con el sol ya pegando fuerte y la mochila a cuestas, comenzamos a hacer caminado los ocho kilometros, que separan la estacion de la frontera. Son las 8 de la manana. Esta vez, nadie nos recoge en su coche.                        Middelburg 
      Salimos de Sudafrica sin problemas, siendo conscientes de que tendremos que volver a pagar, los 30 dolares de la visa de Mozambique. En tierra de nadie, nos encontramos con el mencionado blanquito, que nos dejo alojarnos en su casa gratis y que nos come a besos y abrazos.
 
      De todas formas, tratamos de ver si cuela que nos pongan el sello de entrada en el visado anterior: Ay!. Tan viajados como estamos y tan ingenuos!!!. Asi, que nos ponemos a la cola para rellenar nuevamente los papeles del visado y cuando estamos terminando, leemos en un cartel, que el precio de la visa es de 2.818 meticales o su cambio correspondiente, en divisas fuertes occidentales. Lo que significa, 64 euros u 87 dolares. Ni mas ni menos, que el triple de lo que pagamos hace escasos veinte dias.
 
      Sorprendidos -aunque con poco esperanza-, pedimos esplicaciones y la unica que nos dan, es que las cosas son asi y si queremos volver a entrar pagando lo mismo, probemos de nuevo suerte por la otra frontera, distante unos 1.800 kilometros de aqui. Sin mas controversias, retornamos a Sudafrica y deshacemos nuevamente andando, el camino hacia Komatipoort, con la cabeza ardiendo por el sol y los pies abrasados por el asfalto, como si acabaramos de salir del propio infierno.                                                                                                Middelburg  
 
      Estamos hundidos, como en ningun momento de cualquier otro viaje. Solo queremos volver a casa, pero nuestro deseo, por supuesto, no puede ser inmediato. Nos invade el silencio. Es de las pocas veces, que a un problema, no le encontramos una posible solucion. Para colmo, el tren de vuelta a Johanesburgo sale a diario, con la excepcion de los sabados y hoy es, precisamente ese dia.
 
      Aqui -en esta poblacion de 2.000 habitantes- hay pocos alojamientos y son muy caros. Estamos tan desanimados y destrozados, que ni siquiera hacemos intencion de buscarlos. Que pase lo que pase!!!. Que sea lo que sea!!!. Resulta de locos dormir a la intemperie en Sudafrica, pero hoy hasta este tema, nos da absoilutamente igual. Pasar las 30 horas, que restan hasta que salga el tren, en estas condiciones, va a convertirse en un infierno.
 
      Paseamos, retozamos en la hierba y sobre las seis y media de la tarde, nos apalancamos ante una gasolinera, que todavia permanece abierta. Cada cuarto de hora, uno de los dos se acerca a la casa del blanquito, a ver si nos puede ofrecer la misma habitacion, por una modica y razonable cantidad. Pero, no esta en su vivienda.
 
      Anochece. A los pocos minutos, un coche en el que viajan una mujer blanca y otra negra, se detiene frente a nosotros. Indagan sobre nuestra situacion y se asunstan, ante nuestras inflexibles pretensiones, de pasar la noche alli. Nos ofrecen 500 rands (50 euros) en efectivo, que por supuesto, rechazamos. Nos hacen subir a su automovil, con el pretexto de llevarnos, a un alojamiento muy barato.
 
      Llegamos hasta el. La mujer blanca se apea del coche y nos pide, que esperemos. Cuando por fin, entremos al alojamiento, ya lo tiene todo negociado y pagado con el propietario: 450 rands por la habitacion, 45 por persona por la cena y otros tantos, por el desayuno ingles completo: huevos, beicon, cereales, tostadas con mantequilla y mermelada, yogurt... En total, mas de 60 euros.Komatipoort 
      Nos negamos a aceptarlo. Pero, la mujer es expeditiva: "Tal vez algun dia, vosotros podais hacer lo mismo por mi. El dinero no tiene ninguna importancia, comparado con la vida de las personas". Nos quedamos sin argumentos. Solo somos capaces, de ofrecerle nuestros correos electronicos y nuestra casa, por si algun dia tienen a bien, visitar nuestro pais.
 
      Nos despedimos, dejamos el equipaje en la habitacion y nos dirigimos al comedor a cenar -por supuesto, pap con pollo-. Alli conversamos animadamente, con una pareja argentino-suiza, que tambien estan haciendo un viaje largo por Africa. Manana entraran en Mozambique y nos canjean por dolares americanos, todos los meticales que nos habian sobrado, circunstancia a la que no habia accedido ninguna oficina de cambio, ni siquiera en Johanesburgo.
 Beit Bridge, cerca de Musina, en la frontera entre Sudáfrica y Zimbabwe


      Esto es Africa!!!. O sufres o estas en la gloria. No hay termino medio.

      Nuestros nuevos planes, pasan por volar desde Johanesburgo a Lusaka, Lilongwe o Dar es Salam, pero hacerse composiciones de futuro aqui, es casi absurdo. La sensacion que tenemos, es que nos tocara vivir para siempre en Johanesburgo. Si, definitivamente es asi, mandadnos al menos, una felicitacion por Navidad.

viernes, 4 de febrero de 2011

Pretoria: la antitesis de Johanesburgo

       La web del ministerio de exteriores, advierte con contundencia, que no se tome el Metrorail entre Johanesbugo y Pretoria. Paranoias gubernamentales. Mas les valdria, que actualizaran el precio del visado de Zambia. Hemos visto centenares de sitios en este continente, donde es mas facil ser asaltado, que en este masificado transporte. Sus unicos inconvenientes son la lentitud y la poca fiabilidad de los horarios. Pero, es muy barato.
 
      Pretoria es la antitesis de Johanesburgo. Limpia, ordenada, de amplias avenidas y bonitas y enormes plazas -la de la estacion, la del ayuntamiento y la Church Square-, que albergan bellos edificios. Hasta la gente viste mejor aqui y aunque en la peatonal avenida comercial hay tenderetes, apenas se aprecian en el resto de calles, con la excepcion de los puestos de fruta (estamos en la epoca de los ricos mangos, las uvas, los platanos...)
 
      Johanesburgo, por el contrario -a tan solo cincuenta kilometros-, se reinventa cada dia, con los mismos ingredientes, aunque con un resultado y sabor distintos. Es una ciudad de extremos. Del estresante bullicio y en tan solo unos minutos, se pasa a la desolacion mas absoluta, cuando sobre las seis, cierran las tiendas y desaparece el trafico. Poco despues, la tension se corta como un cuchillo. Es hora de refugiarse en el hotel, desde donde casi no se escucha nada, salvo alguna discusion que otra y sirenas de la policia.
 
      Mientras hay luz, el caos es predominante, aunque relativamente controlado. Las estrechas aceras del centro, acogen en un lado a las tiendas y en el otro, a tenderetes montados sobre estanterias. Por el medio circulan cargadas de bultos -sobre la cabeza o de las manos-, las personas. Nadie hace ningun esfuerzo por esquivar dar un golpe y todo se soluciona, con un superficial "sorry", para luego volver a darte otra vez. Cuando llueve -muy frecuente en esta epoca-, se duplica el grado de dificultad para moverse por esta selva.
 
      Aunque el trafico no es tan agresivo como en El Cairo, Bangkok o Ho Chi Minh, el acoso al peaton es constante. No se daran cuenta, que una ciudad mas humana, seria mejor para todos?. Pero, el punto fuerte de las personas aqui, no es pensar. La cabeza se utiliza mas bien, para llevar bultos sobre ella, raparsela o hacerse trenzas.
 
      Sirva de ejemplo de lo anterior su dieta: todos los dias, un par de minusculas piezas de pollo con una montonera de insulso y espeso pap. Echando cuentas y por el mismo dinero, casi se puede comer un pollo entero, sin guarnicion o un kilo de salchichas. Auque, que podemos pedir a un pueblo, que esta dispuesto a morirse de SIDA, antes de ponerse un condon.


Todas las fotos de este post, pertenecen a Pretoria

miércoles, 2 de febrero de 2011

En la encrucijada


                                                                                     Komatipoort (Sudáfrica)
            Nos encontramos en la encrucijada, sin no tener claro, como seguir. Estamos encerrados, como en el viaje de America. Aunque esta vez, no es por el tapon del Darien, sino por un maldito pais llamado Zambia.

            Han quedado descartadas todas las opciones de volar. Al alto precio de los vuelos hay que anadir, el de los taxis a los aeropuertos -en Africa, no hay transporte publico hacia ellos, normalmente- y el precio de los visados. Volar hasta Zambia nos costaria 124 euros por persona + 60 de taxis, mas 75 de visados. Eso solo, por poner los pies en Lusaka. Zambia ademas de desabastecido, es un pais caro. Y despues de haber visto las cataratas y la presa, apenas nos interesa el resto.
           Vilanculo (Mozambique)
            Volar a Malawi, Tanzania, Kenia o Etiopia, sale por un ojo de la cara. Es mas barato hacerlo desde aqui a Bangkok y hasta nos lo estamos pensando. Echamos de menos la queridisima Asia. No queremos volver a Espana.

            Por tierra, las perspectivas no son mejores. Por un lado, estamos taponados por  Mozambique y Zimbabwe, donde deberiamos volver a pagar visado. Por el otro esta Namibia. Pero tendriamos que hacer unos cuantos miles de kilometros, para contemplar atractivos bastante dispersos y al final toparnos, con la maldita Zambia, tras recorrer el corredor del Caprivi.
                                                                                                       
            A alguien se le ocurre alguna idea?

            Por lo demas, en Johanesburgo hace bastante fresquito -que es de agradecer, tras el calido periplo por Mozambique-, estamos en un buen hotel, a 20 euros la noche y lo pasamos bien, en una ciudad, que es genial. Junto a Ciudad del Cabo y Durban -y con el permiso de Beira, en Mozambique-, son las que mas nos han gustado. Ademas, aqui ganamos una Copa del Mundo, cosa que no ocurre todos los dias. Por desgracia, el estadio Soccer City, donde se consiguio la gesta, esta algo lejos, en Soweto, donde no deberiamos ir solos e ir organizado, sale caro e insulso.
                                                                                                            Nata (Botswana
            Africa es maravillosa. Y aun mucho mas, tomarse una Black Label de 75 cl, despues de los torridos dias de calor, darse una buena ducha al final de la jornada o ser recogido por una camioneta, cuando vas cargado con la mochila por una carretera y recibes al arrancar, el frescor del aire en movimiento.

            Manana nos vamos a Pretoria. Ya os seguiremos contando (a arreones, como hasta ahora).
      

martes, 1 de febrero de 2011

Maravillosos encuentros en Suazilandia

                                                                   Mbabane
      Los mosquitos de Maputo -una ciudad algo destartalada, que nos ha decepcionado un poco-, hacen caso omiso hasta del repelente. Por lo que tuvimos que dormir dentro de nuestras sabanas cosidas y aun asi, nos machacaron las manos y la cara. El hotel es un conglomerado de habitaciones, a alquilar por horas, para el desfogue de hombres y mujeres calientes -que en Africa meriodnal -lo son casi todos-. No es un lugar inseguro, ni siquiera lugubre, auqnue de noche resulta algo siniestro, ver las puestas de los cuartos abiertas, a la espera de clientes, con la luz encendida y enormes ventiladores de aspas dando vueltas, cuan molinos de viento.
                Reserva de Mlilbane
      Tras dejar Mozambique, nos ocurrieron varios hechos agradables. En Komatiport (Sudafrica), un blanquito nos recogio con su coche, tras cruzar la frontera y nos ofrecio su casa, de forma gratuita como alojamiento, para pasar la noche. Dormimos en una habitacion con aire acondicionado, de las cinco que tiene la casa. En el garaje, descansa una enorme barca -manana a las siete y tras amanecer, nuestro anfitrion se va a pescar- y dos coches. Se trata por tanto de un hombre de posibles, tal vez jubilado, que tambien nos agasaja con alimentos, agua y todo el cafe con leche que pudieramos tomar.
 
      Al dia siguiente y ya en Suazilandia, nos encontamos a la primera persona, que hemos escuchado en espanol, en los dos ultimos meses. Se trata de un religioso norteamericano, de treintaytantos anos, que trabaja para el pastor de una iglesia y que nos llevo a su casa, nos presento a su rubia y amable mujer y nos ofrecio informacion turistica del pais.
                                             Reserva de Mlilbane
      Y una jornada despues, en una reserva natural poco frecuentada, de este mismo pais -donde se contemplan cebras, hipopotamos, impalas, antilopes, cocodrilos-, coincidimos con una pareja de argentinos, que llevan viajando por este continente, a lo largo de mes y medio. Compartimos mas de tres horas de experiencias, en una velada memorable.
 
      Ellos han pasado rapido por Mozambique, pero vienen encantados con Malawi, lo que aun ha despertado mas ganas de las que ya teniamos, por visitar ese pais, dominado por las creencias exotericas y uno de los mas pobres del mundo. Y no es de extranar. Porque cuando alli uno consigue prospera, por ejemplo con el ganado, los del pueblo lo achacan a la brujeria y o lo expulsan del lugar o lo apalean.
                     Reserva de Mlilbane
      En otro lugar de esa misma nacion, unos pudientes europeos, compraron una playa, para construirse casas. El dinero ingresado por los nativos, fue destinado, fundamentalmente, a comprar una segunda esposa.

      Charlamos sobre el SIDA en la zona, que en algunos lugares como Botsuana -aunque en todos los paises en general-, ha reducido la esperanza de vida, desde los 74 a los 27 anos Increible, no?. Hay una cancion de moda aqui, que dice: "Si te entra el SIDA, es parte de la vida. Si tienes un hijo no deseado -cosa muy frecuente aqui-, es parte de la vida...". Aunque parezca estremecedor, seria dificil poder subsistir aqui con una filosofia mas combativa.
 
      Al hilo del tema, el actual presidente sudafricano, fue enjuiciado, por abusar sexualmente de una sobrina con VIH. Por supuesto ha salido indemne, incluso reconociendo los hechos. En un momento del juicio, su senoria pregunto al acusado: "Y sabiendo que ella estaba infectada del virus, tomo usted alguna precaucion?". "Si -contesto el-. Una vez que acabamos, me di una buena ducha.
                                                                                 Reserva de Mlilbane

El duro y colorido transporte publico de Mozambique (y en general, de toda Africa)

                                                                                               Vilanculo 
Solo en Mozambique pueden, intentar tratar de cobrarte cuatro veces lo que vale el pasaje, por subir la mochila al ferry. Asi nos ocurrio ayer, en el barco que une Maxixe con Inhamabane.

      Lo bueno de viajar en los diversos transportes de este pais, es que ya quedas vacunado para lo que pueda ocurrir, en cualquier otra parte del mundo. Han sido unos 1.800 kilometros en minibus, microbus, autobus, camion y ferry, duros, duros, duros.
                                                                              Vilanculo
      Para empezar, todos los buses de medio y largo recorrido, salen a los cuatro de la manana, por lo que te obligan a desperdiciar una noche de hotel y pegarte el gran madrugon o a pasar la velada en blanco, de la forma que mejor veas. El mismo vehiculo aqui -como en otros paises de Africa-, hace funciones de transporte de mercancias, muebles, otros vehiculos, animales y personas (siendo estas ultimas, las que reciben peor trato). Y el servicio es puerta a puerta, con numerosas paradas, en mitad de la nada, donde misteriosamente, se van apeando los pasajeros.         
 
      No es infrecuente ver un microbus para 14 pasajeros, con 19 adultos, 5 churumbeles llorones y una cabra envuelta en un saco y colocada en el maletero trasero, que bala estremecida, tras cada bote que da el vehiculo, en la abrupta y encharcada carretera.
                                    Inhambane
      Ademas, claro, del numeroso y voluminoso equipaje. Porque aqui, nunca se viaja con lo puesto. El kit basico femenino, consiste en un bareno vacio, un saco lleno -desconocemos de que- y una criatura a la espalda, generalmente de semanas o meses, que cabezea constantemente, con los movimientos maternos. El masculino, sustituye el balde por enormes garrafones amarillos -con contenido o no- y al bebe, por una caja de 24 coca colas o algo similar.
                                                  
      A partir de ahi y dependiendo del tamano del transporte, se encuentra lo mas insopechado, tanto en el techo de los autobuses, como en un carro amarrado, del que van tirando: una motocicleta, un sofa, una cama, un ventilador, una television con los cables pelados, enormes barras metalicas envueltas en hojas de parra... Y lo sorprendente es, que a pesar del caos parente, de la deteriorada red viaria y de las condiciones climatologicas, todo llega a su destino sin merma, extravio o a destiempo.
                                         
      Pillar un asiento adecuado en el cacharro de turno, no es tarea facil, dado que los hay desplegables y sin respaldo -cuando no, de pie- o junto al crio vomiton, a la gorda de turno o al que no se lava hace semanas -afortunadamente, en este caso, son excepciones-. Por suerte y en torear estos inconvenientes, ya nos movemos como peces en el agua


                                                                                  El Tofo




                                                                                               Inhambane
                                                                                                    Maputo

Beira: Encantadora y decadente

                                          Todas las fotos, que contiene este post, son de Beira
      Los mozambiquenos no son como el resto de los habitantes del sur de Africa. No tienen un aguante infinito y cuando sienten lastimados sus derechos, se enojan y reclaman al estilo latino. Se nota que este pais fue colonia portuguesa, hasta 1975.
 
      Tambien se aprecia la influencia lusa, en la construccion de sus ciudades. Aqui los supermercados y las gasolineras estan a las afueras y las casas, las pensiones, los edificios administrativos y las plazas, en el centro.
 
      Llueve intensamente, mientras viajamos en un destartalado microbus con goteras, tapadas con cinta aislante y trapos, sin ningun resultado positivo. Nos dirigimos a Beira, una ciudad alejada de los circuitos turisticos y en la que hemos acabado de rebote.
 
      A nuestra llegada, los charcos son inmensas lagunas y los canalones y goteras desaguan tal cantidad, como no veiamos desde nuestra visita a las cataratas Victoria. Hubiera sido un error, no venir hasta aqui. La ciudad esta llena de edificios coloniales, lamentablemente, en distinto estado de conservacion. Cuenta con una anodina catedral, una mezquita, en un barrio de comerciantes hindues y la plaza del Municipio, que es lo mas europero que hemos visto, desde que salimos de Ciudad del Cabo. El mercado, en forma de puestos en el suelo sobre el barro o sobre sabanas, se extiende por toda la ciudad.
 
      Tras comer explendidamente, como a lo largo de todo el viaje, gracias a la comida preparada de los supermeercados, nos acercamos al puerto, donde se amontonan bastantes barcos destartalados. Aunque el ruido de fondo es de herramientas, por lo que tal vez, los esten arreglando.
 
      Buscando la playa, de repente nos vemos inmersos, en el barrio mas deprimido, que hemos visto en toda Africa. En el inicio de una calle, se ubican las letrinas comunes, con un cartel que asegura, que han sido mejoradas. Como estarian antes, si su hedor provoca el vomito, a mas de cincuenta metros.
 
      En la rua principal, se entremezclan los puestos -de bebidas alcoholicas, jabon, galletas...-, con las infraviviendas. Ambos tienen la misma estructura: maderas cruzadas, de inestable soporte, con techos de paja y ramas. Los enormes y profundos charcos -que pisan descalzos-, se entremezclan con las montoneras de basura.
 
      En un "complejo" -especie de bar-, se lee: "Entraras triste y saldras contento". No es de extranar, con bebidas de 43 grados a tan solo 14 meticales (unos 30 centimos). En una vivienda, algo mejor que la media, un supuesto doctor vende tratamientos contra la agonia y todos los dolores corporales, entre otros.
 
       Por fin encontramos la playa, mientras contemplamos como varios hombres cargan sobre sus espaldas, como animales, los troncos con los que esta construida toda la barriada. No es la unica actividad economica, que se observa aqui. Sobre la arena se venden mangos, cocos, camarones y otros pescados irreconocibles, recien salidos del agua. En otro lugar, hay decenas de kilos de peces secandose al sol -que nos quieren vender, por solo mirarlos- o los ya deshidratados, a los que les quitan las impurezas con una criba. Se comercializan por sacos, a lo largo de todo el pais.
 
      Todo el mundo a lo suyo, mientras los ninos corretean, como en cualquier parte. Nadie parece reparar en los dos intrusos blanquitos, que con discreccion, no cesan de hacer fotos.